Origen y fundamento de Europa

  Suarez 2 (2)  por Luis Suárez, Real Academia de la Historia

            Aunque la mitología clásica recogida por Ovidio en su Metamorfosis presenta a Europa como la hija de Agenor, rey de Fenicia, trasladada por Júniper (en forma de toro blanco) al continente que daría su nombre, nos referimos aquí a otro significado. Aquél que le conferirían losEuropa es un nombre de mujer - Zenda monjes Beda y Eghinardo, allá por los siglos VIII y IX d. C. En efecto, ellos la interpretarían como un espacio específico de cultura, arraigada fundamentalmente en el cristianismo, que ampliaba los antiguos límites de la latinidad, cuyo legado pretendió asumir el proyecto imperial de Carlomagno. Alrededor de esas fechas Europa mudaría su nomenclatura por el de Cristiandad, con su doble dimensión de comunidad formada por fieles bautizados y en la búsqueda del bien común. Sólo en el siglo XV y por iniciativa de un Papa humanista como Pío II se restauraría el título original de Europa. Con ello quería indicarse que, en aquella época de nuevos descubrimientos, había ya poblaciones cristianas dignas de tal nombre fuera de aquel ámbito geográfico, sin resultar, por tanto, exclusivo de un lugar concreto.

            Es clara, por tanto, la influencia de la fe cristiana en la conformación de Europa. No obstante, tuvo que bregar con la inercia del helenismo sintetizado en el antropocentrismo griego (el hombre como medida de todas las cosas) y las tesis orientales que divinizaban el poder político. Pese a todo, el cristianismo fue implementándose de manera gradual por cuanto admitía en su sistema de pensamiento esa comunicación íntima entre la trascendencia y la inmanencia revelada en la naturaleza divina y humana de Jesús de Nazaret. De aquí el El Rostro de Jesús según Sábana Santaconsecuente reconocimiento de la dignidad inherente a todo ser humano, al haber sido adoptada por Jesucristo. Si a esto se añade que Dios es Amor, como lo enseña el evangelista y apóstol Juan, todas las criaturas son el resultado de ese don gratuito. Entonces, el hombre manifiesta esa imagen y semejanza de Dios por su condición racional, de la que emerge una nueva conciencia de libertad basada en el libre albedrío. Éste obliga a la persona humana a tomar decisiones constantemente que, a su vez, la convierte en responsable de sus propios actos. Esta necesidad de elegir entre varias opciones, característica de un ser con capacidad racional, implica una renuncia a cuanto no se ha elegido por devenir dañino o perjudicial. Desde dicha premisa, se trataría de un signo evidente del ejercicio de la libertad, vinculado siempre a la virtud moral.

            Sobre estos principios se iría alzando el nuevo edificio de la europeidad. Mucho contribuyeron a esta empresa nombres propios como el de Benito de Nursia (san Benito). En los inicios del siglo VI propuso un modelo de vida dentro de los monasterios, antesala en este mundo de la perfección de aquel otro: el eterno. Con este fin, Benito redactó su Regla, erigiéndose en todo un desafío para la renovación deSan Benito y su Regla – Abadía de Silos un mundo que había presenciado la caída del Imperio romano en Occidente, invadido por los pueblos germánicos. Toda la zozobra generada por ese cambio de época no exigía, según Benito, ninguna revolución social; ni siquiera una modificación de las estructuras externas, sino la reforma del hombre interior, único camino para una mejora sincera y auténtica de la sociedad. Para lograrlo debía asentarse el principio de que sólo la verdad (identificada con Dios) libera al hombre y le proporciona la plena libertad. Las virtudes y el desprendimiento aparecen así como indispensables para adherirse a ella. De esta manera, la pobreza, la castidad y la obediencia forman tres dimensiones. En la primera, los bienes materiales actúan como medios y no fines para la vida humana. De igual modo no se repudia la sexualidad, sino que se ordena como expresión de ese amor agapé, comprometido y entregado, prefigurando la dimensión del Cielo, en el caso de los monjes, donde «ellos serán como ángeles» (Mt, 22, 30); o en la reciprocidad conyugal, reflejo de la imagen de Cristo y su Iglesia. En cuanto a la obediencia, los monjes fueron conscientes de que la libertad de cada persona depende de que todos cumplan con lo que es debido: el deber. Éste consiste en la libre asunción de una «deuda» que se ha de retribuir (el bien que se ha recibido), afirmándose así la libertad como servicio y el derecho que se deriva para el individuo y la comunidad (social, monástica…). No extraña, pues, que los monjes dieran el título de abad a su superior, tomándolo del arameo abbá (papaíto), tal como lo utilizara cariñosamente Jesús para dirigirse a Dios (Mc 14. 36). La exigencia del deber permitiría a los europeos descubrir, por encima de la simple fidelidad, la virtud de la lealtad. Pues aquélla obliga a seguir al mando sin preguntarse por la justicia de su causa, mientras que la lealtad sirve a esa autoridad aconsejando rectamente −según se debe− para evitar incurra en injusticia.

            De acuerdo con lo dicho hasta aquí, de la dignificación de la persona debía inferirse la del trabajo, borrando la diferencia que la sociedad antigua estableciera entre las artes liberales y las labores serviles (el cultivo y la labranza), confiadas a los esclavos. Conforme a la Ora & Labora Day, All Day of Prayer & Work at the Priory - St. Thomas More  Prioryóptica de san Benito y la Orden por él fundada, el trabajo agrícola fue interpretado en toda su dignidad porque se inscribía en el plan de Dios de custodiar la creación y se acercaba al oficio manual que desarrollara Jesús de Nazaret. Así, los monjes conciliarían su dedicación a la oración y al estudio con el trabajo manual, a imitación del Redentor. Este nuevo planteamiento iría desgastando los vínculos serviles heredados de la Antigüedad hasta llegar a erradicar, por fin, la servidumbre y la esclavitud en Europa.

            Dentro de todas estas aportaciones cabe incluir la de la ordenación del tiempo. Los monjes descubrieron una especie de ritmo en su empleo, sin olvidar la importancia del descanso. La jornada contemplaba tres actividades sucesivas: la del trabajo (opus manuum), la del estudio, y la de la oración (opus Dei), labor suprema, al concebirse la existencia humana como un proceso de encuentro con Dios.

            Aunque el mensaje espiritual contenido en la Regla de Benito se dirigía a los monjes de manera inmediata y radical, esos consejos acerca del modo de alcanzar la perfección en la vida cristiana eran extensibles a todos, incluso a los laicos. En este sentido, los monasterios se convirtieron en centros de irradiación de un ideal o meta a la que debía tenderse. No olvidemos que Beda y Eghinardo formaban parte de la Orden de San Benito. Europa recibió, por esta vía, algunas de sus características esenciales, configurando una civilización integralmente desarrollada que se extendería por otros continentes.

Esclavitud y humanismo en el Nuevo Mundo

foto-sol  por María del Sol Romano, filósofa

Pugna de intereses en América

    El primer obispo de Michoacán, jurista y humanista español Vasco Vázquez de Quiroga y Alonso de la Cárcel (c. 1470-1565) viajó al Nuevo Mundo en 1531 como oidor de la Segunda Real Audiencia[2], que ejercía y representaba el gobierno de la Corona. Poco antes, en 1529, se había reunido una Junta en España para resolver la conflictiva situación provocada por la Primera Audiencia presidida por Nuño de Guzmán enLa conquista de Nuño Beltrán de Guzmán alumno: Josue López Bernal el territorio de Nueva España. Los excesos y abusos cometidos contra los aborígenes precipitaron la destitución de sus miembros y el nombramiento de otros nuevos. Cuando Quiroga llegó a Nueva España halló una tierra herida por la codicia y el expolio de muchos de los primeros encomenderos, que sometían a esclavitud a los indígenas[3]. Quiroga tenía ante sí la ardua tarea de encontrar una solución a este grave problema. Quizá es a partir de ese primer contacto con la tragedia de la población cuando debió empezar a plantearse la idea de concentrar a los indios en pueblos donde pudieran reunirse, sobrevivir económicamente y autogobernarse, como bien indica Paz Serrano[4].

      Con la Segunda constitución de la Real Audiencia llegó también a la Nueva España la prohibición de la esclavitud. Una medida con la que se pretendían detener los atropellos cometidos de acuerdo con lo que en 1504 había testado la reina Isabel I de Castilla:

[…] suplico al Rey y mando a la Princesa, mi hija, no consientan ni den lugar a Isabel la católica, reina de Castilla. Grandes personajes - Educapequesque los indios vecinos y moradores de las dichas Islas y Tierra Firme, ganadas y por ganar, reciban agravio alguno en sus personas ni bienes, sino que manden que sean bien y justamente tratados; y que si algún agravio han recibido, que lo remedien y provean por manera que no se exceda en cosa alguna lo que por las letras apostólicas nos es infundido y mandado[5].

    Sin embargo, en 1534 la mayor parte de los encomenderos españoles, que estaban a favor de la esclavitud, alegaron ante el rey Carlos serias dificultades derivadas de la prohibición legal. Se revocó entonces la disposición inicial; aunque bajo ciertas condiciones y previsiones[6]:

Hemos sido informados por cartas y relaciones de muchas y principales personas, que de la aplicación de la Provisión del 2 agosto de 1530, que prohibía hacer esclavos de guerras justas y por otros motivos, se han seguido graves inconvenientes, como el seguirse más muertes de los naturales, el rebelarse los indios contra los cristianos y matarlos, el perderse haciendas y casas por no tener esclavos que las sustenten; y, al no poder comprar esclavos, éstos siguen idolatrando con sus antiguos señores, privándoles de hacerse cristianos con dueños españoles: y, en consecuencia, la tierra no se podrá Biografía de Carlos I de España - Carlos V de Alemania (Su vida, historia,  bio resumida)poblar y se perderá. A tenor de lo cual, platicado con nuestro Consejo de Indias, hemos decidido que los indios capturados en guerras justas puedan de nuevo ser reducidos a esclavitud, pero con estas condiciones: que las mujeres y los niños de catorce años abajo no puedan ser hechos esclavos; que los esclavos de Tierra Firme no puedan ser llevados a las islas; que la guerra no pueda ser iniciada sin el permiso del gobernador de la Provincia y de dos religiosos; que los indios así capturados se tengan como naborías libres hasta que las Audiencias den sentencia sobre si son esclavos o no; que, al ser informados que los caciques y principales indios hacen esclavos por causas injustas y livianas, hagan las autoridades averiguación de si lo han sido justamente a tenor de las leyes de nuestros reinos[7].

   Para esos encomenderos era necesaria una guerra justa para responder a la supuesta rebelión de los indios y, de esta manera, justificar la esclavitud. Varios religiosos y oidores se opusieron a la revocación. Entre ellos estaba Quiroga que, en 1535, escribe su obra Información en Derecho dirigida al Consejo de Indias.

      En este texto, el jurista español expresa su rechazo a quienes ocultan la verdad y persiguen sus propios intereses. Igualmente, se muestra dispuesto a no callar, sino a señalar la verdadera situación que viven los naturales y a tomar medidas al respecto, como también hiciera Bartolomé de las Casas - Wikipedia, la enciclopedia libreBartolomé de las Casas. Por ello, afirma Quiroga que “colorar y disimular lo malo y callar la verdad, yo no sé si es de prudentes y discretos; pero cierto sé que no es de mi condición, ni cosa que callando yo haya de disimular, aprobar ni consentir, mientras a hablar me obligare el cargo”[8]. En este mismo texto, Quiroga denuncia la admisión de la esclavitud de los indios bajo el pretexto de la guerra, porque, en realidad, lo que motivaba a muchos encomenderos era su codicia insaciable de riquezas y no de justicia.

La propuesta de Vasco de Quiroga

      Quiroga reacciona ante la violencia, la crueldad y la injusticia con que eran tratados los naturales. Sabía muy bien que las acciones de esos conquistadores eran contrarias al Evangelio, que había inspirado losMuere Vasco de Quiroga (14 marzo 1565) – España en la historia primeros documentos legales de la Corona española de conformidad con las bulas del Papa Alejandro VI de 1493. En consecuencia, advierte Quiroga: “si [los indios] estaban antes de la venida de los españoles en una tiranía puestos, opresos y tiranizados, ahora, después de venidos, los veo que están en ciento entre nosotros, debiendo ser todo al contrario, [de modo] que alabasen y conociesen a Dios en la libertad cristiana y saliesen de opresiones y tiranías”[9].

      Esto condujo a Quiroga a dedicar su vida y obra a la defensa de los indios y al reconocimiento de su dignidad. Pero la defensa de esta dignidad no se limitaba a palabras o escritos; el jurista español tenía un plan de acción, un proyecto concreto que asegurara y garantizara a los naturales una vida digna, que les permitiera arraigarse en una comunidad. Se trata de los pueblos-hospitales, una obra que fue pensada para prestar atención a grupos humanos considerados por el Oidor como indefensos y vulnerables: los huérfanos, los enfermos, los vagabundos o huidizos por temor a la esclavitud y a los trabajos forzados[10].

Ávila y Moreila hermanados por Vasco de Quiroga - Iglesia Española - COPE

      El jurista español veía en este proyecto un remedio para proteger a los indios de la injusticia causada por la codicia de algunos de sus compatriotas. Asimismo, lo concebía como un referente de las acciones a realizar y como un modelo a seguir[11], en la medida en que constituía una obligación moral y una oportunidad viable de resarcir el daño injustamente inferido, a decir de González Cruz[12]. Los pueblos-hospitales salvarían, por tanto, la conciencia de la Corona, cuya presencia en las Indias se fundaba en los documentos pontificios y su consiguiente obligación de evangelizar y civilizar a sus habitantes[13].

     Quiroga veía en su proyecto de pueblos-hospitales del Nuevo Mundo la ciudad ideal destinada a establecer un equilibrio entre lo espiritual y lo temporal. Por un lado, era el lugar para poner en práctica la organización política, social y económica a la que aspiraba otro humanista cristiano deTomás Moro - Wikipedia, la enciclopedia libre su tiempo, Tomás Moro, en su Utopía. Un intento, en definitiva, de recuperar las formas y el espíritu fraternal de las primeras comunidades cristianas. Esto se debió a que el jurista español observaba en el indio cualidades naturales que le conferían un carácter privilegiado para intentar reconstruir con ellos el ideal de la primitiva cristiandad[14]. Por ello, en su Carta al Consejo de Indias manifiesta que era necesario transmitir la doctrina cristiana a los indios:

[…] porque naturalmente tienen ynata de humylldad, obediencia y pobreza y menosprecio del mundo y desnudez, andando descalzos con el cabello largo syn cosa alguna en la cabeza […] a la manera que andaban los apóstoles[15].

       El pueblo-hospital era el lugar ideal para que los naturales pudieran perseverar en la fe cristiana y se mantuvieran alejados de un ambiente pagano, que tendía a propiciar la esclavitud. El pueblo-hospital era, pues, hogar, refugio, lugar de socialización y de trabajo; en fin, una escuela de la fe[16].

Balance

    Todo lo dicho hasta ahora podría interpretarse como una forma de justificar la conquista sin más. No obstante, el jurista y prelado español procuró conducirse según una recta conciencia ética y religiosa, como muestra su denuncia ante la barbarie y los abusos que observó como obispo y oidor de la Real Audiencia, condenando en todo momento las injusticias cometidas.

      Quiroga centró su atención principalmente en los más desfavorecidos, en las personas que, por naturaleza, eran dignas y libres y, sin embargo, no eran reconocidas en el espacio social y político. Se trataba de aquellos que estaban inmersos en un estado de servidumbre tanto antes como justo después de la llegada de los españoles.

   Ciertamente, la obra y actuación de Quiroga en la Real Audiencia, secundada por otras relaciones igualmente elevadas a la consideración del Consejo de Indias, permitieron la revocación de la Provisión dictada en 1534 por medio de las Nuevas Leyes y Ordenanzas de 1542, que prohibieron explícitamente la esclavitud de los aborígenes, conforme a la voluntad inicial manifestada por la Corona:

El Emperador reconoce públicamente que su principal preocupación ha sido la conservación y aumento de los indios, su conversión a la fe católica y buen tratamiento, como personas libres y vasallos nuestros como lo son: al tratarse de un asunto de gran trascendencia, lo ha encomendado al estudio y reflexión de personas de todos los estados, prelados, caballeros, religiosos y a los del Consejo de Indias, negocio que diversas veces había sido discutido y platicado ante el Emperador: éste estima que, al estar suficientemente maduro y para descargo de su real conciencia: ordena y manda que, de aquí en adelante, por ninguna causa de guerra ni otra alguna, aunque sea so título de rebelión, ni por rescate, ni de otra manera, no se puedan hacer esclavos indios algunos, y queremos que sean tratados como vasallos nuestros de la Corona de Castilla, pues lo son.

  Así, frente a esa estructura social que esclavizaba, excluía y desarraigaba a los indios, el proyecto de Quiroga se concretó en la construcción de una comunidad más justa, más humana, que fuera una fuente de arraigo, como luego iría desarrollándose en la América hispana debido a estos estímulos de raigambre cristiana.

[1] El presente texto es un extracto ampliado del artículo en francés “Simone Weil et Vasco de Quiroga. À propos du colonialisme et de l’enracinement”, publicado en: Cahiers Simone Weil, t. XLIII, n. 4, décembre 2020, pp. 373-389.

[2] En 1529, se reúne una junta en España para resolver una situación muy conflictiva en la Nueva España provocada por la Primera Audiencia. Esta última tenía la misión de representar a la Corona en la Nueva España y de gobernar. En vez de esto, sus miembros, que eran movidos por la codicia, se dedicaron a cometer una serie de injusticias y actos violentos particularmente contra los indios. Por esta razón, se decide establecer en 1530 la Segunda Audiencia, en la que Quiroga es nombrado “oidor”. Véase P. Serrano Gassent, Vasco de Quiroga: utopía y derecho en la conquista de América, Madrid, UNED-FCE, 2001, pp. 18-19.

[3] M. González Cruz, Teología de la misericordia, implícita en los escritos y en la praxis de Vasco de Quiroga (1470/1478-1565), Tlalpan, Universidad Pontificia de México, A. C., 2012, p. 11.

[4] P. Serrano Gassent, Vasco de Quiroga: utopía y derecho…, op. cit., p. 19.

[5] Véase L. Suárez, “Análisis del testamento de Isabel la Católica” en Cuadernos de Historia Moderna, nº 13, Editorial Complutense, 1992, p. 88.

[6] Véase P. Serrano Gassent, op. cit., p. 20.

[7] Provisión para todas las islas y tierras descubiertas (20 de febrero de 1534), en J. M Añoveros, “Carlos V y la abolición de la esclavitud de los indios”, Revista de Indias, nº 218, vol. LX, 2000, p. 72.

[8] V. de Quiroga, Información en derecho, México, SEP, 1985, p. 62.

[9] Op. cit., pp. 100-101.

[10] M. González Cruz, Teología de la misericordia…, op. cit., p. 119.

[11] Véase P. Serrano Gassent (ed), “Introducción”, V. de Quiroga, La Utopía en América, Madrid, Historia 16, 1992, p. 22.

[12] M. González Cruz, Teología de la misericordia…, op. cit., p. 120.

[13] P. Serrano Gassent, “Introducción”, La Utopía en América, op. cit., p. 22.

[14] P. Serrano Gassent, “Introducción”, La Utopía en América, op. cit., p. 7.

[15] V. de Quiroga, “Carta al consejo”, La Utopía en América, op. cit., pp. 57-58.

[16] Véase M. González Cruz, Teología de la misericordia…, op. cit., p. 122.

El centrismo liberal

antoniomoralroncal (2) por Antonio M. Moral Roncal, historiador

La tercera vía y sus reformas

   En España, durante el reinado de Isabel II (1843-1868) el sistema inicial de partidos giró en torno a dos grandes agrupaciones: los moderados y los progresistas, cuyas luchas políticas y permanencias en el poder entre 1834 y 1858 desgastaron poderosamente su imagen. Ello facilitó la creación de un nuevo partido, la Unión Liberal liderada por don Leopoldo O´Donnell, con vocación centrista entre las anterioresLeopoldo O'Donnell - Curiosidades, Familia, Biografía | Famous Birthdays formaciones. La creencia de que la sociedad deseaba paz y normalidad, abriendo un periodo de calma después de muchos años de luchas políticas, armó de fe a sus dirigentes en la consecución de este proyecto. Si tomamos como programa de la primera experiencia de gobierno de la Unión Liberal (1858-1863) el manifiesto firmado en Madrid el 17 de septiembre de 1854, puede concluirse que llevó a cabo la mayoría de sus puntos esenciales. Entre éstos sobresalen las grandes inversiones en las comunicaciones ferroviarias, reorganización de la Hacienda, presupuestos para fomentar sectores económicos nacionales aprovechando la positiva coyuntura europea, impulso del Estado liberal mediante la mejora de su administración, potenciación de estatutos profesionales, promoción de la Armada y del Ejército, etc. En consecuencia, se inició un desarrollo económico innegable: creció el número de superficie cultivable, aumentó el mercado nacional, aunque se invirtió desatinadamente en ferrocarriles, en vez de acelerar la industrialización.

   No obstante, la economía dependió excesivamente de las inversiones extranjeras. Hacia finales de 1864, el capital español representaba el 60% de todos los bancos y sociedades de crédito. A pesar de ello, el deseo unionista de modernización económica supuso el más notable y consciente esfuerzo para la promoción del desarrollo registrado en toda la historia del liberalismo español hasta ese momento.

   Su carácter centrista llevó a la Unión Liberal a finalizar con la tendencia reaccionaria de los últimos ministerios moderados, pero después de restablecer la calma política y modernizar la imagen pública de la Corona, resultaba inaplazable llevar a cabo una política reformista. El gran objetivo político debía ser la regeneración política y la creación de un turno pacífico en el poder mediante la reforma electoral, una nueva ley de imprenta y una prudente descentralización de la administración. Pero, en estos aspectos, para evitar la desunión entre sus filas, O´Donnell y sus ministros prefirieron retardar al máximo estas medidas, sacrificándolas en el altar de la estabilidad, confiándolo todo al innegable crecimiento económico.

Diplomacia y acción internacional

   Su política exterior tuvo claros objetivos -pese a todas las leyendas en su contra- alcanzando sonoros éxitos como la campaña de África en 1860. Las expediciones y presencia españolas en el escenario Almanaque: Las guerras de España con Marruecos [1ª parte: 1859-1860]internacional siempre tuvieron como últimas metas la protección de los restos del imperio español en Asia y América, el impulso del comercio y la economía, así como la búsqueda del reconocimiento exterior de la capacidad de defensa del Ejército y de la modernización de la Armada. Asimismo, la política exterior para O´Donnell también intentó ser una de las medidas orquestadas para rescatar a la oposición progresista de la tendencia abstencionista que le conducía a la revolución.

Dificultades de un proyecto político

   O´Donnell soñó con constituir a su agrupación como partido único, nacional, pero con el paso de los años advirtió la imposibilidad de ese proyecto, como le señalaron algunos diputados de la oposición, ya que hubiera supuesto la destrucción de la misma esencia del régimen constitucional. Finalmente, el lógico agotamiento de su gobierno y la imposibilidad de cohesionar un auténtico partido centrista le llevaron ax Ramón María Narváez y Campos : Family tree by Luis MANUEL de VILLENA  CABEZA (lmvillena) - Geneanet la necesidad de preveer un futuro. La Unión Liberal había sido la asociación pero no la fusión de conservadores y progresistas. De esta manera, intentó reorganizar el sistema de partidos: la Unión Liberal debía asumir la posición de centroderecha, el Partido Progresista un centroizquierda, colocando en los extremos al moderantismo y al republicanismo. Sin embargo, el Partido Moderado se negó a desaparecer, sostenido todavía por Ramón Narváez y el sector neocatólico.

   O´Donnell abandonó el gobierno en 1863 ante la división interna de la Unión Liberal debido a la timidez con la que se afrontaron algunos cambios políticos importantes, por la falta final de apoyos institucionales y por la posibilidad de reemplazo que parecía ofrecer el Partido Progresista, que aspiraba a recuperar el poder. Pero debe subrayarse el hecho de que O´Donnell abandonó el gobierno sin ningún pronunciamiento, sin derrota electoral, sólo por desgaste natural después de un lustro en la presidencia; un tiempo récord de permanencia  hasta ese momento.

El segundo gobierno centrista

   La Unión Liberal volvió al poder en junio de 1865, tras unos gabinetes moderados. En su primer discurso, O´Donnell prometió una reforma de la ley de imprenta y de la ley electoral; la continuación de la Leopoldo O'Donnell - Wikipedia, la enciclopedia libredesamortización eclesiástica todavía irresuelta; y la resolución de los problemas pendientes de política exterior, como el reconocimiento del reino de Italia. En poco tiempo, y sólo dos años antes de la famosa reforma británica del conservador Disraeli, la ampliación del cuerpo electoral mediante ley puso de relieve la firmeza y sinceridad de sus propósitos por introducir en España un régimen político moderno, movilizador de sus capas medias, social y económicamente dinámicas. Fue una muestra de su deseo por adecuar el régimen español a sus homólogos europeos.

   El gobierno unionista logró cumplir la mitad de su programa, pero no pudo llevar a cabo la reorganización del sistema de partidos: Prim no consiguió hacerse con el liderazgo indiscutible del progresismo pese al apoyo de otros líderes como Madoz, pues Olózaga y el sector que acaudillaba fue lo suficientemente poderoso para imponer, finalmente, el abstencionismo y la ruptura revolucionaria. Asimismo, la Unión Liberal fracasó en su intento por desterrar el pronunciamiento militar como un medio políticamente válido para acceder al poder y, por la cuestión italiana, terminó enfrentado con la Iglesia en su búsqueda de apoyos progresistas. Los neocatólicos no le perdonaron que reconociera diplomáticamente al gobierno italiano que había invadido los Estados Pontificios y los progresistas no se fiaron de su reforma electoral. El 10 de julio de 1866, O´Donnell presentó su dimisión a una Isabel II, dudosa de que su partido fuera capaz de evitar la revolución.

La Gloriosa de 1868, la revolución que no obró el milagro, pero que sí  remontó la economía

Intentos de supervivencia

   La Unión Liberal sobrevivió a su principal líder y terminó integrándose en la coalición revolucionaria que derribó del trono a la reina en 1868. Sus diputados apoyaron la Constitución de 1869 y el primer intento dec) Portal Fuenterrebollo ««« implantar en España una Monarquía democrática. Sin embargo, ante el caos del Sexenio Revolucionario, la incapacidad de sus gobernantes, la sucesión de regímenes, el estallido de la Tercera Guerra Carlista, la cubana y los cantonales, los unionistas terminaron apoyando el proyecto de restauración monárquica-constitucional en la figura de Alfonso XII, ideado por Antonio Cánovas del Castillo.

Lecciones presentes

   Actualmente, observamos cómo un intento de creación y potenciación de un proyecto político centrista en torno al partido Ciudadanos ha fracasado, pese a las grandes esperanzas iniciales y fuerte crecimiento. Como en el caso de la Unión Liberal, Ciudadanos se benefició del desgaste de su oponentes a derecha e izquierda; como la Unión Liberal, se encontró con una izquierda progresista que le rechazó como socio de gobierno y que intentó destruir a Ciudadanos, buscando sus votos. También, como la Unión Liberal, se encontró a su derecha con un Partido Popular que resistió su crisis y se negó a morir. Y como los unionistas, los líderes de Ciudadanos no lograron tampoco convertirse en un gran partido de centro-derecha por su indefinición doctrinaria y su apego a las medidas coyunturales.

cs (2)

   A diferencia de la Unión Liberal, Ciudadanos no ha logrado alcanzar el gobierno nacional aunque, indudablemente, logró poder autonómico. La opción naranja parece, por el momento, caminar hacia el fracaso más absoluto, pese a las grandes esperanzas que se depositaron en sus comienzos. Su consolidación tal vez hubiera facilitado un partido bisagra que podía haber gobernado tanto con PP como con PSOE, sustituyendo a la trágica y autodestructiva -para España- dependencia de los partidos independentistas, proetarras y de extrema izquierda.

Utilidad pública de los colegios profesionales

GREGORIO-ALAYON (2)  por Gregorio Alayón, jurista

Planteamiento

   ¿Sirven para algo los colegios profesionales? ¿Hay algo que distinga a estas entidades de cualquier otra asociación? ¿En qué se justifica que la posibilidad de ejercer algunas actividades lleve aparejado de modo obligatorio la pertenencia a un colegio? Estas y otras muchas preguntas similares habitualmente surgen cuando se habla de los colegios profesionales.

Claves jurídicas

   Los colegios profesionales, en España, se definen en el artículo 1.1 de la Ley 2/1974, de 13 de febrero como “…Corporaciones de derecho público, amparadas por la Ley y reconocidas por el Estado, con personalidad jurídica propia y plena capacidad para el cumplimiento de sus fines…”. No obstante, la doctrina tradicionalmente ha matizado que se trata de entes de derecho semipúblico, pues ni su organización, ni actividades, ni su régimen jurídico son plenamente asimilables al sector público, pese a que lleven a cabo, entre otras, algunas funciones públicas, fundamentalmente relacionadas con la disciplina profesional y en el caso de las profesiones jurídicas la gestión de una prestación social pública como es el llamado “turno de oficio”.

   Para la comprensión de cualquier institución jurídica, además de atender a los fines que persigue, suele ser útil la comparación tanto en el eje temporal como en el espacial. Si bien la historia y la “tradición” no justifican por sí mismas la persistencia de la institución y tampoco lo hace la mera existencia de otras similares en otros países, sí es cierto que nos proporcionan pistas acerca de su utilidad y de las razones de su existencia.

Antecedentes históricos

   Los colegios profesionales tienen una larga tradición en nuestro ordenamiento jurídico. En este sentido, es importante mencionar que los antecedentes de la regulación de las profesiones de colegiación obligatoria surgen casi simultáneamente a las propias profesiones. Así, por ejemplo, ya desde el S.XIII en Las Partidas se regula la abogacía en Castilla, prácticamente al mismo tiempo que se profesionaliza la actividad con la recepción de Ius Commune[1]. Es más, los requisitos básicos para el ejercicio de esa profesión se encuentran claramente reglados desde tiempos de los Reyes Católicos de modo similar al de nuestros días tanto en Castilla como en la Corona de Aragón y Navarra. Quien fuera a ejercer debía ser graduado, examinado y matriculado[2]. De este requisito de matrícula ante los tribunales deviene la obligación de colegiación en el colegio local.

   La pertenencia a una corporación como requisito para ejercer ante los tribunales no aparece como una característica exclusiva del derecho histórico español. En Inglaterra, por ejemplo, se conservan registros escritos de 1422, los “Black Books” del Lincoln´s Inn (uno de los  Inns Of Court  londinenses), que testimonian la existencia de estas instituciones que cumplen funciones similares a las de los colegios profesionales españoles desde fechas muy tempranas[3].

   Llegados a este punto, sabiendo que existe un fundamento legal, un arraigo histórico y que los colegios no son una “rareza” hispánica, procede analizar qué es lo que distingue a un colegio profesional de cualquier otra agrupación de personas que se dedican profesionalmente a una determinada actividad.

Particularidades de los colegios

   La clave para distinguir a los colegios profesionales de las meras asociaciones sectoriales se encuentra en la “obligatoriedad” de pertenecer a la entidad. Así, frente a las “profesiones tituladas”, cuyo ejercicio está condicionado a estar en posesión de una determinada titulación o licencia -no necesariamente académica- o a las actividades libres a las que cualquier persona puede dedicarse, el rasgo característico de las “profesiones colegiadas” es la pertenencia obligatoria al colegio. De ahí que no todas las agrupaciones profesionales que llevan la mención “colegio” en su denominación constituyan colegios profesionales en sentido estricto y lleven a cabo las funciones específicas que la ley les reserva.

   Se plantea, entonces, la cuestión de qué es lo que justifica que la colegiación sea obligatoria. Esta reserva de actividad se reconoce nada más que a aquellas actividades cuyo objeto y función resulta especialmente vinculado a aspectos de gran relevancia social tales como la vida, la salud, la libertad o la tutela de derechos fundamentales como es el caso de las profesiones sanitarias o jurídicas o de otras cuyo ejercicio descuidado puede generar graves daños como las ingenierías.

Utilidad pública

   Finalmente, para facilitar una comprensión cabal de la cuestión queda por expresar cuáles son las consecuencias de pertenecer a uno de estos colegios profesionales de colegiación obligatoria. Fundamentalmente, la principal diferencia entre estas entidades y cualesquiera otras de agrupación voluntaria es que los miembros de la corporación se encuentran obligados a cumplir con la normativa propia de la profesión y a someterse a la potestad disciplinaria del respectivo colegio. Es en esta cuestión disciplinaria donde se manifiesta la particularidad más clara de los colegios profesionales, pues de ella se desprende el carácter público de la entidad y la especialidad de estas instituciones. Carácter público en cuanto que la potestad disciplinaria implica la facultad de sancionar con penas no sólo pecuniarias sino con la suspensión temporal del ejercicio e incluso con la expulsión de la profesión. Carácter especial en tanto que las normas que fundamentan la disciplina colegial tienen una base de ética práctica, esto es, de deontología que es lo que explica que la función disciplinaria  la desarrollen los colegios profesionales y no dependa de otras administraciones públicas, pues como ha tenido ocasión de expresar el Tribunal Constitucional en el FJ 6º de su Sentencia de 17-01-2013: “…La razón de atribuir a estas entidades, y no a la Administración, las funciones públicas sobre la profesión, de las que constituyen el principal exponente la deontología y ética profesional y, con ello, el control de las desviaciones en la práctica profesional, estriba en la pericia y experiencia de los profesionales que constituyen su base corporativa[4]. De aquí la utilidad o servicio público de unos colegios que, guiados por dichos principios, aportan a la sociedad el cuidado de las prácticas profesionales para garantizar el buen hacer en todos los ámbitos, como en el caso de la abogacía, la medicina o la arquitectura, entre otros.

[1] ALONSO ROMERO, M.P. GARRIGA ACOSTA, C. El régimen jurídico de la abogacía en Castilla (siglos XIII-XVIII). Ed. Universidad Carlos III de Madrid, Madrid, 2014, pág 11-13.

[2] Novísima recopilación de las leyes de España, Tomo II, Libros V, Título XXII Ley I – BERMUDEZ, A..La abogacía en el ámbito de la monarquía hispana de los siglos XVI y XVII” Historia de la abogacía española, vol I, Thomson Reuters ARANZADI, Cizur Menor (Navarra), 2015,  pág. 600-601

[3] SCHOECK,  R. J.  “Aspects of the Inns of Court, Canadian Catholic Historical Association  (CCHA) Report nº32, 1965, pág 37

[4] GONZALEZ CUETO, T. “La colegiación del abogado es obligatoria” Diario La Ley, Nº 9079, Sección Tribuna, 13 de Noviembre de 2017, Editorial Wolters Kluwer, consultado el 5-07-2022.

El mestizaje del barroco hispanoamericano

whatsapp-image-2016-09-30-at-1-57-45-am por Rodrigo Ledesma Gómez, historiador del arte

   Como es sabido el término barroco fue acuñado como tal, por primera vez, por el historiador suizo Jakob Buckhardt en el año de 1855 dentro de su trabajo El Cicerone, aunque lo hace de manera despectiva al definirlo como una decadencia del renacimiento, ya que lo propone como una degeneración de esa época. Años más tarde, en 1888, el también suizo Henrich Wölfflin en su obra Renacimiento y Barroco, habla ya del barroco como un periodo posterior al clasicismo italiano y desarrollado en el siglo XVII, por lo tanto, le da características propias de un estilo, ya que: “Intentó la caracterización de fenómenos específicamente barrocos utilizando pares antitéticos como ‘lineal – pictórico’, ‘movimiento – estatismo’, ‘abierto – cerrado’, ‘aprehensible no aprehensible’ ”.[1]

  En el siglo XX el alemán-suizo Werner Weisbach trata al barroco como un arte emanado de lo que se conoce como la Contrarreforma de la Iglesia Católica, después del Concilio de Trento y las directrices para el arte dictadas por San Carlos Borromeo. Ya bien entrado el siglo XX, uno de los más reconocidos historiadores del arte, el austriaco-inglés Ernst Gombrich, en su afamada Historia del Arte, explica que el vocablo barroco:

“…fue un término empleado por los comentaristas de una época posterior que combatieron las tendencias del siglo XVII y desearon ridiculizarlas. Barroco significa, realmente, absurdo o grotesco, y la palabra fue empleada por personas que insistieron en que las formas de los edificios clásicos nunca debían ser aplicadas o combinadas de otra manera que como lo fueron por griegos o romanos. Desdeñar las reglas estrictas de la arquitectura antigua les parecía a esos críticos una lamentable falta de gusto; de ahí que denominaran estilo barroco al de los que tal hacían”.[2]

    Desde finales del siglo XVI, hasta mediados del siglo XVIII, el desarrollo del arte barroco se dio en numerosas modalidades en las artes plásticas en los diversos territorios de Europa occidental. En los países católicos este arte estará fuertemente vinculado con la fe, por lo que la gran mayoría de las obras realizadas denotan sus rasgos religiosos.

  Así pues, en los virreinatos españoles de la Nueva España y del Perú, desde el siglo XVII el furor del estilo se arraigará fuertemente tanto en las capitales, como en las ciudades, a la vez que en pueblos de indios, elaborándose obras tanto por maestros españoles, como criollos, mestizos y hasta “naturales”, consiguiéndose trabajos que van desde el más estricto purismo académico, hasta variantes barrocas netamente regionales.

 Vastos territorios, geografías disímiles, climas variados, materiales locales, etnicidades nativas, dieron como consecuencia una arte que se adaptaba a las necesidades de cada lugar, con aportaciones propias del reflejo del arte español, que en el caso de los doscientos años del barroco que se dio en variantes regionales, hay que estudiarlo desde su propia perspectiva, sin querer encajonarlo dentro de una visión eurocéntrica.

 Sobre la convivencia entre los distintos pobladores en los vastos territorios conquistados por los españoles en el “Orbe Novo” y que esto se vio irradiado en el arte, bien nos puede servir la explicación que da el historiador mexicano Rodrigo Martínez Baracs cuando expone cómo era esa relación social:

En la Nueva España jamás hubo un aislamiento de los grupos étnicos, desde la conquista comenzó un permanente entrecruzamiento de europeos, indios y africanos que dará lugar a una población muy variada con un alto grado de movilidad social y económica, que no dependía tanto de la ‘calidad racial’, como de factores personales, familiares, culturales y circunstanciales de todo tipo”.[3]

  Si bien esta descripción es para uno de los virreinatos españoles, se puede aplicar a los otros tres: el del Perú y los creados durante las reformas borbónicas de Carlos III, el de la Nueva Granada y el del Río de la Plata.

  Así pues, al respecto de esa mezcla de etnicidades, el historiador del arte español-chileno Leopoldo Castedo en su amplia obra Historia del Arte Iberoamericano ofrece la siguiente afirmación:

“A mayor abundamiento, el mestizaje, afortunada expresión del ser americano de fusión ibérica, contribuyó en sus diversas latitudes y dimensiones a enraizar el espíritu del Barroco en el alma popular. Peninsulares, criollos, mestizos, mulatos, negros e indios, los alarifes-arquitectos, los pintores y escultores, los poetas y dramaturgos, los oradores sagrados, fueron capaces en la América colonial de equiparar y, en no pocas ocasiones, superar, el modelo europeo, sobre todo en cuanto ornamentación, tanto visual como literaria”.[4]

   Catedrales, parroquias, conventos masculinos y femeninos, santuarios, iglesias de barrio, todo fue construido, reconstruido, adornado bajo los influjos del barroco durante doscientos años. Fue en la arquitectura donde más podemos ver las variantes barrocas y especialmente en la religiosa, pues el fervor, la fe y el prestigio social hacían que se llevaran a cabo obras de gran envergadura en los diversos sectores sociales y étnicos.

   Dentro de construcciones barrocas híbridas, mestizas, que reflejan el encanto de las creaciones regionales está la iglesia de San Lorenzo de Carangas[5] en la ciudad de Potosí, Bolivia. Iniciada desde la fundación de la ciudad en 1548 tuvo una importante reconstrucción en siglo XVIII, cuya profusa y exuberante fachada fue construida entre 1728 y 1744 “que marcó el momento culminante del estilo mestizo y del barroco potosino”.[6]

   La fachada-retablo de la iglesia de San Lorenzo trabajada en cantera, se empotra dentro de un arco a manera de un gran nicho. El extradós del arco de la puerta está decorado con roleos y la clave lleva el signo de la cruz. Las impostas se conforman por unas cariátides con el torso desnudo que sostienen el arranque del arco, mientras que el resto del cuerpo se integra a la pilastra. La puerta se encuentra flanqueada por unas columnas con fuste salomónico en la primera mitad y la otra parte la conforma unas “indiátides”, término utilizado para describir cariátides, pero que llevan elementos indígenas, cuyos brazos descansan en la cintura, de donde parte una falda confeccionada con plumas. Precisamente esas “indiátides” son una de las características distintivas del “estilo mestizo”.

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Portada de la iglesia de San Lorenzo de Carangas en Potosí (Bolivia)

   En las columnas se aprecian las “indiátides”. En el segundo cuerpo, el Arcángel San Miguel ataviado con faldellín, con su espada, escudo y casco, yace en un nicho de arco de medio punto. Las columnas que enmarcan al nicho también llevan en la mitad del fuste decoración del barroco salomónico, con uvas y vides, mientras que la otra sección está ornada con unos ángeles coronados que se encuentran parados sobre unos originalísimos adornos que circundan la columna.

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Segundo cuerpo de la portada de San Lorenzo de Carangas

  El Arcángel Miguel y en las columnas los ángeles parados sobre adornos. Sobre el muro del fondo, a cada lado, aparecen unas sirenas tocando un instrumento musical de cuerdas, que seguramente son charangos, típico instrumento musical andino. Para equilibrar la disposición de las sirenas, la del lado derecho rasguea su instrumento con la mano izquierda. Las alucinantes creaturas marinas se ubican dentro de un cielo estrellado, acompañadas respectivamente por el sol y la luna. Y, entonces, viene la pregunta. ¿Qué tienen que hacer unas sirenas símbolo del pecado en la portada de una iglesia cristiana?

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Extremo del segundo cuerpo de la Iglesia de San Lorenzo de Carangas

   Existe una historia andina que en el lago Titicaca habitaban dos sirenas, Quesintuu y Umantuu, quienes copularon con Tunupa, deidad del cosmos andino pre-inca, por lo tanto se les asocia con el pecado carnal.[7] De aquí es que se puede interpretar lo siguiente:

“Las sirenas que aparecen en la portada de la iglesia de San Lorenzo cargan un instrumento musical, motivo que puede tener dos explicaciones. Por un lado, la teoría de Platón, que atribuye a la música de ocho sirenas el movimiento de las esferas celestes lo que estaría reforzado en la portada por la presencia del sol, la luna y las estrellas que representan el cielo y la presencia de otros personajes portando  instrumentos musicales como los ángeles. Por el otro lado, a la simbolización del pecado, la lujuria y la tentación, que suelen ser personificados en las figuras de sirenas que tañen un instrumento musical como la vihuela, el laúd o el charango. En esta segunda explicación se incluiría la historia de Tunupa, Quesintuu y Umantuu. Sin embargo, se considera que la teoría que más se ajusta a la presencia de las sirenas en esta portada es la de Platón, ya que la segunda teoría se relaciona con el lago Titicaca y sus representaciones aparecen en iglesias cercanas a éste”.[8]

   Al final de la portada, en el remate, San Lorenzo acompañado por dos ángeles, está representado a la derecha con su traje de Diácono y la palma de mártir, y de lado izquierdo, con su misma vestimenta porta el símbolo de su martirio, la parrilla donde fue asado durante la persecución del emperador Decio, emprendida a mediados del siglo III. Dos cartelas indican las fechas de inicio y conclusión de la obra: 1728 y 1744.

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San Lorenzo con la parrilla y con la palma del martirio

  La portada de piedra fue esculpida magistralmente por manos indígenas, con composiciones escultóricas planas, de una profusión decorativa abundante, particularidades que la convierten en uno de los más excelsos prototipos del arte barroco mestizo hispanoamericano.

  En México hay un ejemplo extraordinario de barroco mestizo, donde la presencia de lo indígena se aprecia notablemente. Es la iglesia del poblado Santa María Tonanzintla, en el municipio de Cholula, en el estado de Puebla, la cual tiene sus remotos orígenes desde la llegada de los frailes franciscanos a la región.

“El pueblo de Santa María Tonantzintla surgió a mediados del siglo XVI como resultado de un reagrupamiento de la población indígena que había sido afectada por devastadoras epidemias que redujeron la población de Cholula en un 70%.La aldea recién fundada recibió el nombre de Santa María Tonantzintla, asociando el nombre de la nueva localidad con el desaparecido santuario donde se veneraba a Tonantzin”.[9]

   Su etimología es en legua náhuatl: “to” nuestro(a), “nantli” carne, madre, “tzin”, sufijo que simboliza pequeño(a); entonces su significación es “nuestra madrecita”. Los franciscanos substituyeron a Tonantzin por la Virgen María, bajo la advocación de la Inmaculada Concepción, a quien los indios del lugar la nombraron Tonanzintla, con el sufijo “tlan” que en náhuatl es “lugar conquistado”. Así pues, la iglesia, que funciona como santuario significa: lugar de nuestra madrecita.

   Durante el siglo XVIII se dio en varios lugares de la Nueva España una fiebre constructiva y de renovación de edificios tanto civiles como religiosos, debido a las bonanzas económicas de producción agrícola, comercio y de la minería, entre otras. La región de Cholula rica en barros y yesos no se quedó atrás y los lugareños de Santa María Tonantzintla iniciaron una nueva construcción de su santuario para erigir en estuco una maravilla barroca decorativa, cargada de símbolos y personajes.

   Hacia el segundo tercio del siglo XVIII se realizó el nuevo edificio con planta de cruz latina dedicado a la madre de Jesús. La portada que se desplaza hacia el frente está confeccionada con ladrillo y azulejos de talavera poblana manufacturada en la región, la cual no ofrece la idea de la grandeza artística de su interior. La razón de que esté hacia el frente y más adelante de la torre fue porque se agregó hacia el último tercio del siglo XVIII.

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Santuario de San María Tonantzintla, Cholula, Puebla, México

   Por dentro el santuario es un derrame de ornatos con representaciones de jaculatorias marianas, del Hijo, de los cuatro Padres de la Iglesia y los cuatro Evangelistas, a quienes es difícil de identificar por la falta de sus atributos, de santos franciscanos y atiborrado de ángeles, vides, uvas y donde el Espíritu Santo en su representación de paloma, arroja sus llamas de espiritualidad desde lo alto de la cúpula a través de nervaduras cilíndricas profusamente aderezadas. No hay un espacio vacío, un verdadero “horror vacui” confeccionado con manos indígenas, produciendo un barroco mestizo popular de lo más excelso de lo que se ha realizado en el barroco hispanoamericano.

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Santa María Tonantzintla, interior, parte izquierda de la cúpula y muro

   San Diego de Alcalá con la cruz y un canasto. Con túnica azul un Evangelista, posiblemente San Mateo y arriba con tiara obispal un Padre de la Iglesia, tal vez San Agustín.

   Pedro Rojas, uno de los investigadores mexicanos que hizo una de las mejores monografías de Santa María Tonantzintla, habla del interior del templo manifestando:

 “La contemplación del interior de la iglesia es muy importante. Produce un arrobo tan singular que las palabras son pobres para expresarlo. Las vivencias se sacuden lo mismo a la vista del conjunto que por el detenido examen. Y se sienten con una inseparable unidad de sentidos religiosos y estético. Todo el fervor religioso y la inventiva plástica, puestos en juego para rendir un amoroso culto a la Virgen María, aparecen impresos en el recogimiento del pequeño ámbito”.[10]

   Uno de los más asiduos estudiosos del barroco mexicano, Manuel González Galván, dentro de su categorización estilística a la que le llama “Modalidades formales del barroco en México”, clasifica a la iglesia de Santa María Tonantzintla dentro del Barroco Estucado, al cual lo describe así:

El barroco estucado se caracteriza por ser puramente decorativo y didáctico; es pues anástilo: no emplea el apoyo arquitectónico, pero se sujeta a composición y no rebasa los límites que le marcan los paños en que se aplica. Cubre pilastras, arcos y bóvedas sin ocultarlos”.[11]

   Debido al lugar de ubicación y por los múltiples elementos decorativos, el referente popular de los habitantes de Santa María Tonontzintla ha creado discursos relativos a ver influencias de dioses mexicas, o de flores y frutos indígenas de la época prehispánica y que siguieron produciéndose después de la conquista y hasta la fecha, pero no hay un sustento iconográfico más allá de la libre interpretación. Sin embargo, autores como María Ester Ciancas, basada en las investigaciones del prolífero investigador Francisco de la Maza, ofrece una exégesis al respecto de figurillas de las que podrían ser ángeles, pero que carecen de alas: “Por eso se ha pensado que esa cúpula, que cubre un no menos adornado ciprés (unos dos siglos posterior, ya que data de principios del siglo XX), es más la imagen del paraíso indígena, lleno de tlaloques,[12] que la del paraíso católico”.[13]

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San María Tonantzintla, cúpula

   De esta manera y con mayor razón es que estamos hablando de un barroco híbrido, mestizo, elaborado por manos indígenas, que representa una iconografía católica venida de España, pero que es trabajada a la manera de las confecciones artesanales oriundas de la zona.

   La torre de dos cuerpos con cúpula y linternilla ostenta columnas de inspiración salomónica. En las esquinas del segundo cuerpo, están de pie los cuatro evangelistas con sus respectivos atributos. Son de una sencillez plástica, manufacturados con una creatividad que expresa su libertad compositiva y que asemejan a las cándidas figurillas de los nacimientos navideños mexicanos.

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San María Tonantzintla, detalle de la torre con la escultura de San Lucas

   Y sobre el barroco mexicano, en este caso mestizo, Justino Fernández afirmaba:

“Pero el barroco, tan atractivo y gustado, no fue suficiente a las ansias de expresión de lo sublime y transgrediendo sus propios límites fue lanzado a nuevas aventuras…y toda suerte de expresiones libres que dieron cabida a creaciones populares de fino sentimiento y original expresividad”.[14].

   Bien se puede aplicar esta tesis a la iglesia de Santa María Tonantzintla.

[1] Barbara Borngässer y Rolf Toman: “Introducción”, en El Barroco. Arquitectura. Escultura. Pintura, Könemann, Köln, 1997, p. 7.

[2] Ernst Gombrich: Historia del Arte, Garrida, Barcelona, 1992, pp. 313-314.

[3] Rodrigo Martínez Barac: “La idea del México Colonial”, Letras Libres, Año XXIV, número 283, julio 2022, p.13.

[4]Leopoldo Castedo: Historia del Arte Hispanoamericano, Alianza Editorial, Madrid, 1988, p. 191.

[5] Juan Víctor Mamani: “Los carangas y la parroquia de San Lorenzo en el Potosí colonial (s. XVI y XIX)”, arqueológicas, Año 5, No. 5, 2015, p. 73. El autor aclara que los indios carangas fueron llevados a Potosí desde el altiplano centro sur rodeado por el lago Titicaca. Los que participaron en la construcción de la fachada del siglo XVIII ya eran indios criollos.

[6] Ana María Telesca de Abbondio: Arquitectura Colonial, Centro Editor de América Latina,  Buenos Aires, 1977, p.53.

[7]María Eugenia Bifareti, Guillermina Cabra, Camila García Martín, Jorgelina Araceli Sciorra: “El sincretismo como afirmación de identidad: la permanencia de lo autóctono frente a lo europeo en las portadas de la iglesia de San Lorenzo y de la casa de Ricardo Rojas”, III Jornadas Estudiantiles de Investigación en Disciplinas Artísticas y Proyectuales, Facultad de Bellas Artes, Universidad Nacional de La Plata, octubre 2017, p. 6.

[8] Ídem.

[9] Julio Glockner: El paraíso barroco de Santa María Tonantzintla, Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, Puebla, 2018, p. 17.

[10] Pedro Rojas: Tonantzintla. UNAM, México, 1978, p. 62.

[11] Manuel González Galván: “Génesis del barroco y su desarrollo formal en México”, en Historia del Arte Mexicano. Arte Colonial II, Salvat, SEP, México, 1982, p. 817.

[12] Los tlaloques son en el mundo de los muertos, las almas buenas que llegan al Tlalocan, el paraíso donde vive Tláloc, el dios de la lluvia, y ellos le ayudan a repartir el agua.

[13] María Ester Ciancas: El arte en las iglesias de Cholula. Secretaría de Educación Pública, México, 1974, p. 51.

[14] Justino Fernández: “La conciencia estética del arte mexicano dese aquí y ahora”. Estética del Arte Mexicano, UNAM, México, 1990, p. 544.

El relato anti-hispánico: impulso y difusión

Álvaro Sureda (2)  por Álvaro Sureda, historiador

   Este artículo continúa la serie inaugurada sobre la leyenda negra que consideró, en primer lugar, algunos aspectos relacionados con la Conquista de América. Nos disponemos ahora a explicar el origen y la difusión del relato antiespañol elucubrado por algunos españoles,  descifrando sus causas y las consecuencias del mismo.

   Con la unión de Isabel de Castilla y Fernando de Aragón comienza a surgir en el sur de Europa una monarquía unificada que, con el paso del tiempo −sobre todo durante el reinado de Felipe II (1527-1598)− pasará a denominarse monarquía hispánica. Un territorio de una granBiografia de Felipe II extensión distribuido entre Europa occidental, África del norte, Asia y América[1]. Más allá de la capacidad mostrada por los primeros gobernantes españoles para regir tales territorio, fue inevitable la creación de un complejo sistema de administración con funcionarios insertos en sus órganos de gobierno. En el siglo XVII esta situación encontrará su punto álgido con la creación de los validos o privados del rey, que administrarán el Imperio en nombre de los monarcas.

   Esta configuración en la gobernanza de la monarquía incitaría las luchas de facciones nobiliarias por ocupar los altos puestos de la administración. Se trata de un fenómeno amplio, que traspasa el marco hispánico. Tal es el caso de otros gobiernos europeos como el de Richelieu y Mazarino en Francia o Cecil y Buckingham en el Reino de Inglaterra[2]. ​ Durante el gobierno de Felipe II uno de los principales funcionarios de estado fue Antonio Pérez. Aunque no llegó a ocupar el puesto de valido, su cargo como secretario del rey le brindó una posición de poder e influencia hasta que cayó en desgracia, siendo condenado al destierro.

   Este ostracismo supondrá un acontecimiento importante en la historia de España, puesto que dará inicio a la difusión de una serie de relatos que constituirán los fundamentos de la Leyenda Negra.

Juego de intereses y poder

   Antonio Pérez, hijo de Gonzalo Pérez, que también fue secretario de Felipe II, se postuló para ocupar el cargo de secretario a los 26 años de edad, tras la vacante en el puesto. Por entonces Antonio era ya un hombre atractivo —“gentilhombre de cuerpo y buen rostro”, le describe el cronista Cabrera de Córdoba—, extremadamente simpático y con Antonio Pérez del Hierro - Wikipedia, la enciclopedia librellamativo don de gentes. Antonio Pérez pretendió inmediatamente la Secretaría, pero Felipe II, pese a la estimación que le profesaba, decidió pensarlo y pospuso unos meses el nombramiento. Al parecer, según el mismo cronista, el rey tenía a Antonio por un “mozo derramado”, es decir, liviano o indiscreto; persona, en fin, en la que, pese a las simpatías que despertaba, era arriesgado confiar[3]. Sin embargo, acabaría obteniendo el cargo en 1567, pero con atribuciones atenuadas[4].

   Como ocurría en la inmensa mayoría de las cortes de la época, podía presenciarse la división de facciones a nivel político, siendo las más señaladas las agrupadas alrededor del duque de Alba y del príncipe de Éboli, respectivamente. Aunque el padre de Pérez era reconocido seguidor de la facción del duque, su hijo estará desde el principio alineado con el grupo de los Éboli, siendo el príncipe su principal protector. En el momento de su muerte, encontrará igualmente amparo en la esposa del difunto, Ana Mendoza y de la Cerda: la princesa de Éboli.

   Tanto el sistema de alianzas como los rasgos definidos por Cabrera jugarán un papel muy importante en el asunto que estamos tratando. De hecho, son el motivo principal de las acusaciones que recibirá Pérez y su posterior exilio en el extranjero. En 1576, la alianza Pérez-Éboli conseguirá el destierro del duque de Alba, pero a la vez dejará entrever sospechas de la relación entre ambos y la difusión de secretos deAna de Mendoza de la Cerda - Wikipedia, la enciclopedia libre Estado. Con motivo de la pretensión de Felipe II al trono portugués circulará por Madrid el rumor de que el secretario ha comentado datos importantes a la princesa, quien está interesada en la política portuguesa buscando el casamiento de una de sus hijas con el duque de Braganza[5].   Por otro lado, la estrecha relación que mantiene con Juan de Austria, sitúa a Pérez en una encrucijada porque, como es conocido, en ese momento las relaciones del rey con su hermanastro están presididas por la desconfianza.

   Con todo, la relación entre el rey y su secretario sólo se empañará con la aparición en Madrid de Juan de Escobedo, secretario de Juan de Austria. Escobedo, quien llega a la capital para presentar al rey los planes de Don Juan, empieza a ser sospechoso de portar otros mensajes que podrían ensombrecer la fama de Antonio Pérez. Se cree que aquél posee cierta información y capacidad para divulgar rumores acerca de esa estrecha relación con la princesa de Éboli. Por este motivo, el secretario del rey comienza a plantear al monarca que Verdinegro (apodo con el que se refieren a Escobedo) debe de ser la influencia negativa sobre don Juan de Austria, justificando así su eliminación. El 31 de marzo de 1578 será asesinado en un callejón de Madrid.

   Este acontecimiento es discutido por diferentes autores. Unos piensan que la implicación del rey es perfectamente demostrable, como en el caso de Escudero López[6]. Otros, sin embargo, creen que el rey no estaría involucrado; al menos por falta de pruebas, según ha sostenido Kamen[7], por ejemplo. Sea cual sea la implicación de Felipe II, este crimen marcará una cadena de episodios que tendrán una repercusión directa en la vida de Pérez.

La instrumentalización de un proceso

  A pesar de la protección inicial del rey, las tornas cambiarán rápidamente. El 9 de julio, estando el rey en Aranjuez, partirá Salón del Trono: EL CARDENAL GRANVELArápidamente a la capital con motivo de la pesquisa que se realizará al secretario y la princesa de Éboli, quienes además de ser investigados por el asunto de Escobedo, se les añade la acusación de realizar  amenazas contra la vida de Rodrigo Vázquez de Arce, encargado de la investigación del asesinato de Escobedo[8]. Finalmente, con la llegada del Cardenal Granvela, llamado por el rey para hacerse cargo de las funciones de Estado, se ordenaría el arresto de Pérez el día 28 de julio por la noche.

   En los próximos años el caso de Pérez quedaría en suspenso, al ser sustituido por otras circunstancias más apremiantes para la monarquía, como la invasión de Portugal. Aunque éste es uno de los sucesos más importantes, parece ser que la posesión de treinta cofres con documentos confidenciales del rey por parte del secretario[9] pudo albergar otro motivo de indisposición contra él. No obstante, éste conservó todavía cierta libertad de movimientos, pudiendo desplazarse entre sus casas de la capital y el campo, en las que cumplió la reclusión domiciliaria. Como él mismo dijo: “partió el rey para Portugal. Quedó Antonio Pérez en Madrid en aquella casa a manera de prisión. En su oficio no se hizo ninguna novedad. En este estado estuvo hasta 1585”[10].

   En ese año el rey dictó sentencia contra Pérez. La pena consistía en dos años de reclusión y diez años de destierro, además de la suspensión del cargo de Secretario de Estado durante ese tiempo[11]. Con todo, el secretario seguirá un periplo de viajes por diferentes localidades hasta que en febrero de 1590 el monarca emitirá un ultimátum. Después de haber sido torturado el reo emprenderá su huida a Aragón, donde la legislación del reino restringía la potestad del rey[12].

   Desde la llegada de Pérez el problema se irá acentuando. Como explica Escudero, los intentos del convicto por aplacar la situación en una carta en la que se muestra sumiso al rey, no impedirá que la Junta Real confirme la sentencia el 1 de julio de 1590:

Lo debían de condenar y condenaban en pena de muerte natural de horca y a que primero sea arrastrado por las calles públicas en la forma acostumbrada. Y después de muerto le sea cortada la cabeza con un cuchillo de hierro y acero y sea puesta en lugar público.

   El peligro condujo a que Pérez se defendiera con la publicación de una cédula de defensiones en la que acusaba al rey de ordenar la ejecución de Verdinegro. A partir de aquí surgirá la publicación del extenso Memorial de la causa de Pérez, que entonces se conocía como Librillo,  el cual fue publicado en Castilla y Aragón y más tarde en Pau (Francia), cuando Pérez se fugó[13].

   Con la circulación de dicho documento se propagó parte de la leyenda negra por Europa[14]. Si bien es cierto que en anteriores ocasiones se comenzaron a difundir rumores negativos contra la corona hispana a partir de la lectura de la Brevísima Relación de Bartolomé de las Casas o La apología de Guillermo de Orange[15]. En el caso de Antonio Pérez podemos encontrar uno de los primeros casos en los que un español contribuye a alimentar las falsedades sobre las que se asentará la Leyenda.

   Aunque en palabras de Ungerer los escritos de Pérez se fundamentan en el objetivo de criticar al rey, desde el exilio se identificará con los enemigos de Felipe II en Castilla y Aragón, determinándole a publicar sus obras[16]. Esos escritos irán rápidamente más allá de su primer propósito, llegando a desarrollar una propaganda antiespañola para hallar así el apoyo de las diferentes cortes europeas.

   Tras una estancia en Francia, donde decide apoyar a Enrique IV en su intención de invadir España, Antonio Pérez llegó a Londres como enviado del soberano galo. Allí procuró alentar la propaganda Blog de bibliofilia: RELACIONES DE ANTONIO PÉREZantiespañola pensando que sería un buen modo de hacer carrera y publicó sus famosas Relaciones en 1594 bajo el pseudónimo de Rafael y Azarías Peregrino. En Londres, Pérez actúa bajo un seudónimo que no engaña a nadie y finalmente en las ediciones francesas firma con su propio nombre[17]. Como explica María Elvira Roca, dicho texto tuvo un importante éxito, según lo demuestran la continuidad de sus ediciones (1598, 1615, 1624…) y su traducción al francés[18].

   Cuando Pérez llega a Inglaterra busca el apoyo de la “reina Virgen” (Isabel I). Pero al tratarse de unos escritos donde se aprecia un ataque personal a Felipe II, las autoridades inglesas no ven una prioridad a la hora de usarlos porque las relaciones con España atraviesan entonces un período de relativa paz[19]. Si desde un principio Pérez hubiera acudido a los holandeses habría obtenido más apoyo. En una situación en la que el príncipe de Orange siente la necesidad de obtener pruebas que sirvan no sólo para acusar a Felipe, sino para encontrar motivos que justifiquen los levantamientos en los Países Bajos, las obras de Pérez habrían tenido un impulso mayor. Las acusaciones directas que se hacen en el documento sobre el asesinato del príncipe Carlos por parte de su padre son un argumento de especial relevancia, que se identifica mucho con las acusaciones que había realizado previamente el príncipe de Orange en su Apología.

 Otros de los argumentos de incriminación y difamación que se encuentran en la obra del antiguo secretario tratan de describir a Felipe II con una serie de rasgos de tirano o asesino: «la tiranía es tan natural a Felipe como la risa al hombre» y que «no hace distinción de personas; las LA LEYENDA NEGRA ESPAÑOLA – LA ALCAZABAenvenena a todas sin temor de Dios ni vergüenza de los hombres».  Aunque, como hemos visto al principio, en Inglaterra sus afirmaciones no conocerán un apoyo inicial, algunos de los grupos nacionalistas que ven en la monarquía hispánica un peligro utilizarán algunos de estos argumentos para desarrollar una imagen hispanófoba. Como expone Ungerer, las Relaciones fueron traducidas al inglés y publicadas en 1715 en Londres, posiblemente bajo influencia del gobierno, en una época en la que Inglaterra seguía una política agresiva contra España[20].

   El caso más claro de propaganda antiespañola lo podemos observar en tiempos del rey Jacobo I de Inglaterra, sucesor al trono de Isabel I. Durante su reinado, en 1620, se iniciará una serie de fuertes agitaciones propagandísticas que tendrán que ver con la amistad que el rey profesaba al embajador español, en un momento donde se plantea la unión del príncipe de Gales con una infanta española. En un contexto donde los anglicanos deciden preservar sus políticas religiosas, el bando nacionalista-anglicano decide iniciar esta propaganda. Ésta se reproducirá durante la guerra de los Treinta Años y tendrá su punto álgido con  la Revolución Gloriosa de 1688 y la coronación de Guillermo de Orange en el trono inglés[21].

  En 1611 Antonio Pérez morirá en Francia sin apoyos y pobre. Sin embargo, en su testamento confesará su lealtad al rey −entonces, Felipe III− y al catolicismo. Años después se modificará la imagen de Pérez en España. Sus obras alcanzaron una cierta aceptación. Algo que podemos observar en la obra colectiva retrato de españoles ilustres (2)Retratos de Españoles Ilustres con un epítome de sus vidas, que comenzó a publicarse por folletos en 1791 con dedicatoria al conde de Floridablanca, ministro de Carlos IV. Antonio Pérez, por influencia de la línea crítica de la Ilustración contra el modelo sociopolítico español del Siglo de Oro, dejó de ser para muchos un espía traidor para convertirse en una víctima inocente del tétrico Felipe II[22].

Conclusión

  En definitiva, si bien podemos decir que la leyenda negra no fue iniciada por Antonio Pérez, es claro que sus escritos fueron aprovechados para atacar a España y a los españoles. Se recurrió a la hipérbole para convertir una venganza personal contra el rey en todo un proceso contra el sistema de ideas español. De esta manera se empañaría un período de la historia en la que España se muestra preponderante; no sólo como la principal potencia militar del mundo, sino como la principal defensora del catolicismo en Europa, inmersa en las guerras de religión. Quizá si se tuviera en cuenta la máxima vigésimo tercera en su versículo paralelo del libro bíblico de los Proverbios (adquiere la verdad y no la vendas: sabiduría, instrucción, discernimiento) la situación sería bien diferente.

NOTAS

[1] Durante el reinado de Felipe II, aunque no se mantendrá bajo su dominio el Sacro Imperio, que pasará a estar bajo el mando de su tío Fernando, a partir de 1580, tras la batalla de Alcántara, la corona portuguesa pasará a manos de los reyes españoles hasta 1640.

[2] García, Bernardo: Los validos, Akal, Madrid, 1997, pág. 4.

[3] Escudero López, José Antonio:  “Antonio Pérez”, en Real Academia de la Historia, Diccionario Biográfico electrónico, en red,  http://dbe.rah.es/

[4] Cabe señalar, que con el nombramiento de Antonio Pérez, como secretario, se da por primera vez, una división del cargo, puesto que pasará a ser compartido con Gabriel de Zayas. El rey decide que cada uno se ocupe de diferentes partes del gobierno, siendo para Pérez, los asuntos de Italia y Zayas los asuntos del norte de Europa. Dicha partición supondrá en el futuro una cierta rivalidad por la intromisión entre ambos de tareas que originalmente no se corresponden con la división del trabajo.

[5] Kamen, Henry: Felipe de España, Siglo XXI Editores, 1997, Madrid, pág. 175.

[6] [] hoy pueden darse por seguras tres cosas: la complicidad política del Monarca con el crimen de Estado; las relaciones del secretario con la princesa (que, como dijo un testigo, “sabía secretos de Estado”), y la carencia de cualquier tipo de relación pasional entre el Rey y ella. En cuanto a la primera, la complicidad de Felipe II parece manifiesta, tanto por el hecho de que transcurrieran meses hasta iniciarse la investigación, como porque los jueces llegaron a preguntar a Pérez sobre “las causas que había habido para que Su Majestad diese su consentimiento a la muerte del Secretario Escobedo”, o por la tolerancia que se tuvo para que escaparan los asesinos contratados por Pérez. En todo caso, esa complicidad fue tácita, pues el secretario no pudo arrancar del Monarca una orden escrita de la ejecución. A su vez, las relaciones de Pérez con la Éboli parecen notorias, debiendo ella, cuando menos, estar al tanto de cuanto sucedía, hasta el punto de que Pazos, el presidente de Castilla, comunicó al Rey que “tenemos sospecha de que [ella] es la levadura de todo esto”. Las relaciones amorosas de Felipe II con la Éboli, en fin, no pasan de ser una lucubración melodramática. Escudero López: “Antonio Pérez”, art. cit.

[7] Los que creen que el Rey estaba implicado bien pueden sugerir que él mismo destruyó los documentos que lo comprometían, El único texto que al parecer involucra al rey es el de la Haya, en el que Marañón condía plenamente. Si descontamos esta fuente no verificable (es una copia), no hay forma de atribuir responsabilidades al Rey [] Hace falta un nuevo estudio sobre el caso Pérez-Escobedo.  Kamen: Felipe de Españaop. cit, pág. 173.

[8] Muro, Gaspar: Vida de la Princesa de Éboli, Madrid, 1877, pág. 119-124. Citado en  Kamen: Felipe…op cit, pág. 176

[9]  Ibid, pág. 301.

[10] Pérez, Antonio: Relaciones, París 1598, pág. 25.

[11] El rey decidirá finalmente separar los casos de Pérez y de Éboli, siendo el caso de la princesa el que se atenderá el primero y el otro acabará pendiente.

[12] Escudero López: “Antonio Pérez”, art. cit.

[13]Durante todo el tiempo que pasará en Aragón, los problemas que se irán produciendo serán de una extrema gravedad. Un ejemplo de ello serán las conocidas como “Turbaciones de Aragón”, las cuales convertidas en revueltas, llevarán a la intervención directa del ejército para entrar en Zaragoza y una serie de condenados a muerte por haberse opuesto directamente al rey.

[14] Escudero López: “Antonio Pérez”, art. cit.

[15] Es interesante la exposición que hace María Elvira Roca en su libro Imperiofobia y Leyenda negra, donde repasa todo el concepto de Leyenda negra y hace un estudio en profundidad de la Leyenda negra contra España entre otros.

[16] Ungerer, Gustav (1963). «Bibliographical notes on the works of Antonio Perez». Revista de Historia Jerónimo Zurita. Cuadernos 16-18.

[17]  Sobre las variaciones que Pérez va introduciendo según las circunstancias, véase Paloma Bravo, «Las Relaciones de Antonio Pérez, un texto en movimiento», en José Martínez Millán (coord.), Actas del Congreso Internacional «Felipe II (1527-1598): Europa y la Monarquía Católica» (Universidad Autónoma de Madrid, 20-23 de abril de 1998), Madrid: Parteluz, 1998, vol. 4, págs. 11-24. Citado en Roca, María Elvira: Imperiofobia y Leyenda Negra, Siruela, Madrid, 2016, pág. 266.

[18]  Roca: Imperiofobia…op. cit, pág. 266.

[19] Algunos autores como Roca, aventuran que es posible que las anteriores traiciones realizadas por Pérez, no fomentarán una credibilidad en el secretario por parte de Isabel, quién en general se mantuvo un poco al margen de él, aunque sí que hablaron en algunas ocasiones a lo largo de los dos años que Antonio pasará en la corte inglesa. Ibid, pág. 267.

[20]  Ungerer: art. cit.

[21] Roca: Imperiofobia…op. cit, pág. 269

[22] Ibid, pág. 268.

La crisis de Taiwán: una disputa histórica

Juan Carlos por Juan Carlos Rodríguez, historiador

Una nueva bipolaridad

     Los posicionamientos geopolíticos en un mundo globalizado como el nuestro rigen el destino de sus ciudadanos y provocan oscilaciones que explican el comportamiento político y económico de las sociedades.

     En el contexto internacional actual, en el que se han reavivado los bloques de la Guerra Fría debido al conflicto de Ucrania, el papel de la República Popular China tendrá consecuencias a gran escala si sus postulados chocan con los Estados Unidos de América. En los últimos meses se ha hablado mucho sobre el posicionamiento del gigante asiático en referencia a la Guerra de Ucrania. Los occidentales han tildado su comportamiento de prorruso por continuar sus relaciones comerciales con el gobierno de Moscú, mientras que desde la capital rusa, se esperaba una implicación mayor de Pekín.

Intereses encontrados en el Mar Meridional

     En paralelo a los desafíos en Kiev, estamos ante una escalada de la tensión en la zona del Mar Meridional de China, que ha tenido como momento estelar la inoportuna visita de la Presidenta de la Cámara de representantes de EEUU, Nancy Pelosi, a la isla de Taiwán el pasado agosto. Dicha maniobra americana, como la mayoría de las llevadas aQuién es Nancy Pelosi, la funcionaria que generó la tensión con China por  su visita a Taiwán - El Cronista cabo por Washington, no son fruto de la improvisación, sino de una coyuntura internacional determinada. La idea estadounidense es la de presionar al Gobierno de Pekín, marcando su territorio en la zona del Indo-Pacífico para frenar así las pretensiones chinas sobre Taiwán y el Mar Meridional; además de definir la agenda internacional conforme a sus reglas. Una actitud condicionada por los informes del Pentágono cuando detecta posibilidades reales de enfrentamiento directo.

     Al igual que Rusia, China también necesita una salida marítima a su territorio continental. Si quiere mantener y aumentar su prosperidad económica, debe potenciar el Indo-Pacífico –término referido por la geoestrategia− y desplegar así sus tentáculos en el Índico y en el Pacífico occidental. Desde el punto de vista económico, el Mar Meridional de China juega un papel imprescindible para el desarrollo comercial del gigante asiático. Un tercio del comercio marítimo mundial pasa por dicha región y el control de éste por Pekín. Se trata de un objetivo irrenunciable. Dentro del gran proyecto chino de la Nueva Ruta de la Seda, la seguridad del estrecho de Malaca será vital. La gran estrategia marítima de China no es el resultado de un revisionismo territorial, sino más bien el propósito de transformar una situación geográfica desfavorable en una en que el Estado chino se pueda mantener como potencia simultáneamente en los dos océanos: el Índico y el Pacífico occidental[1].

Mar de China     Conviene recordar que el Partido Comunista Chino (PCCh) ha incidido reiteradamente en sus últimos congresos en la necesidad de hacer realidad sus aspiraciones de “devolver” a China a una posición de fuerza, prosperidad y liderazgo en el escenario global. Recordemos que los chinos llaman a su país Zhongguo, que literalmente quiere decir la nación del centro.

     China, a diferencia de su propia visión de hace tan solo unas pocas décadas, parece ahora consciente de que está envuelta en una importante competencia estratégica internacional con otras potencias (particularmente con EE.UU.) al que irremediablemente habrá de hacer frente. China está transformando el orden de seguridad marítima unipolar asiático de los últimos 75 años en uno multipolar.

     Según el coronel José Pardo Santayana, coordinador y analista principal del Instituto Español de Estudios Estratégicos, de ser necesario China podría librar guerras periféricas locales para establecerse en la zona crítica que se extiende desde Malaca hasta Taiwán. Recuperar Taiwán y ejercer un control efectivo sobre el Mar Meridional de China crearía un bastión marítimo seguro que permitiría el establecimiento de una fuerza naval conjunta, concentrada entre la isla de Hainan y Taiwán, capaz de utilizar su posición central para desplegarse rápidamente entre los océanos Pacífico occidental e Índico, con la posibilidad real de actuar en una u otra dirección. Con dicho fin, China ha articulado una estrategia marítima que persigue la gradual finlandización del Sudeste Asiático y la recuperación de Taiwán[2].

     Los intereses chinos en el Mar Meridional chocan con sus vecinos Xi Jinping - Viquipèdia, l'enciclopèdia lliureasiáticos, que ven en peligro su soberanía sobre las aguas limítrofes. Taiwán, Malasia, Vietnam, Brunéi, Indonesia y Filipinas ven amenazados sus dominios marítimos, debido a la creciente militarización de la zona por las fuerzas navales chinas. Además de los países citados, Corea del Sur y Japón dependen de esta vía de comunicación y ven con recelo las maniobras de Xi Jinping.

     Estados Unidos, bien posicionado históricamente en la zona, donde cuenta con numerosas bases navales, se está viendo desplazado y su cooperación con los socios asiáticos es una estrategia que debe seguir cultivando si pretende tener mínimamente controlado al gigante asiático. Dentro de la estrategia estadounidense de limitar la expansión de los intereses chinos, cabe mencionar el incremento de la inversión en la zona y la creación del QUAD (alianza formada por Australia, India, Japón y EEUU).

Bases militares Pacífico

China ante Taiwán: posibles repercusiones

     Taiwán constituyó una pieza clave de la política de Washington en Asia durante la Guerra Fría, permitiendo a la isla el acceso al mercado estadounidense y formar parte del engranaje de las cadenas de suministro mundiales. A partir del restablecimiento de relaciones entre Estados Unidos y la República Popular China (1979) se iniciará una compleja relación triangular Pekín-Washington-Taipéi. Los postulados de la Casa Blanca han sido ambivalentes; por un lado, mimando a Taiwán sin reconocer oficialmente su independencia como Estado y, por otro, presionando a China en sus aspiraciones anexionistas.

     El pasado 10 de agosto, pocos días después de la visita de Nancy Pelosi, el Consejo de Estado Chino publicó un libro blanco titulado La cuestión de Taiwán y la reunificación de China en la nueva era. En él se plasma la narrativa oficial sobre la dirección estratégica en referencia a Taiwán. De entre sus afirmaciones más destacadas sobresalen las siguientes: Somos una China y Taiwán es parte de China. Es un hecho indisputable apoyado por la historia y la ley. Taiwán nunca ha sido un Estado. Su estatus como parte de China es inalterable. Además, el Partido Comunista Chino (PCCh) se compromete con la misión histórica de resolver la cuestión de Taiwán y lograr la reunificación completa de China. Asimismo, deja claro que: Para lograr la reunificación pacífica, debemos reconocer que la parte continental y Taiwán tienen sus propios sistemas sociales e ideologías distintas. El principio de ‘un país con dos sistemas’ es la solución más inclusiva a este problema. Es un enfoque basado en los principios de la democracia, demuestra buena voluntad, busca una resolución pacífica de la cuestión de Taiwán y ofrece beneficios mutuos. Las diferencias en el sistema social no son un obstáculo para la reunificación ni una justificación para el secesionismo.

     De todo ello podemos extraer dos conclusiones. La primera, que nunca ha reconocido la soberanía de Taiwán como Estado independiente y lo considera una parte más de China. La segunda, que, a pesar de ello, se quiere resolver el problema histórico de manera pacífica.

     Para Business insider, una guerra entre China y Taiwán tendría unas consecuencias devastadoras para el sector tecnológico a nivel internacional, mucho más profundas que las que estamos ya viviendo, derivadas de la pandemia de Covid-19. Aumentarían los precios de los productos exportados debido a que los costes de producción de dispositivos tecnológicos serían más elevados, al igual que se produciría una crisis logística en la que los productos y materiales de Taiwán tendrían restricciones para llegar a los mercados. Todo ello se traduciríaElectrónica (2) en el desabastecimiento de semiconductores para la fabricación de los procesadores a nivel mundial (cabe recordar que el 90% son fabricados en la isla). No únicamente habría problemas para empresas con sede en Taiwán como Acer, Asus o Mediatek, sino que además dejaría paralizados a Intel, Qualcomm, AMD, MediaTek, NVIDIA o a la mismísima Apple.

     Se vislumbran dos escenarios posibles. En el primero China iría consiguiendo su objetivo y llegaría a dominar todo el Mar Meridional (de facto, ya reclama el 90% de sus aguas y la isla de Taiwán). En el segundo de los escenarios EEUU y sus socios asiáticos conseguirán limitar las pretensiones chinas y su potencialidad naval. Todo parece indicar la factibilidad de la primera solución, ya que el aliado de la distancia física juega su papel, como ya ocurrió en su día. De producirse cualquiera de los escenarios y, a pesar de algunas de las agitadas declaraciones dadas a conocer por los medios de comunicación sensacionalistas, siempre sería a medio o largo plazo. Estamos, pues, todavía lejos de una guerra abierta entre las partes.

[1] KAUSHAL, Sidharth; MARKIEWITCZ, Magdalena. «Crossing the River by Feeling the Stones. The Trajectory of China’s Maritime Transformation». Occasional Paper. RUSI, octubre de 2019.

[2] PARDO DE SANTAYANA, José: Geopolítica de Asia, el nuevo centro de gravedad del mundo. Panorama Estratégico 2020. Instituto Español de Estudios Estratégicos. Ministerio de Defensa, marzo 2020.

International Year of the Family

ALEX VAZQUEZ PHOTO por José Alejandro Vázquez, IFF

Context

  The Covid-19 pandemic impacted the pace of various United Nations’ efforts to alleviate theburden of uncountable disruptions suffered by many families. On November 15th, 2021 after a turbulent year and not much significant progress on the so-called “family resolution”, Guinea on behalf of the Group of 77 + China, introduced the draft resolution to the Third Committee [1].

  The resolution, co-sponsored by Kazakhstan and Uzbekistan, portrays an effort to highlight the spirit of cooperation and collaboration shown by all member states, which enabled the agreement on important issues addressed in the resolution. At the same time, member states recognized the role of the State of Qatar as a longstanding facilitator of the document and their leadership in accomplishing consensus. [2]

 The consensus achieved is never overestimated considering how delicate family matters haveproven to be. Nevertheless, we celebrate the novelty that this year, the document focus on the preparations for and observance of the thirtieth anniversary of the International Year of the Family in 2024. The upcoming Anniversary is marked by many challenges for families andgovernments alike, urging the need for a collaborative spirit to support families in their social role and as an efficient tool to achieve the 2030 Agenda for Sustainable Development.

   We reproduce in this paper the approved text [3], highlighting some of the new paragraphs added or expanded to show the importance of the resolution in the coming years and especially while having the 30 thAnniversary on the horizon.

Motherhood, Teleworking and the Value of Work

   Encourages Governments […] to develop strategiesand programmes aimed at strengthening national capacities to address national priorities relating to family issues and to step up their efforts, in collaboration with relevant stakeholders, to implement those objectives, in particular in the areas of fighting poverty and hunger to prevent the intergenerational transfer and feminization of poverty and ensure thewell-being of all at all ages in order to achieve the 2030 Agenda for Sustainable Development. [4]

  Up until 2020, several paragraphs featured the role of women in families. The current document brings new perspectives and interesting references to the recognition of mothers in the household and ways how governments can support their role better.

   The transition of becoming a mother poses many challenges and has been relatively well researched, with studies finding that women experience the transition as overwhelming [5]. With motherhood, they also experience improved self-image, growth of their own resources, and a greater sense of meaning in life. [6] The responsibility of being a good mother also involves self-reflection and the ability to cope with fears, demands, and commitments. [7]

   Also encourages Member States to recognize, reduce and redistribute unpaid care and domestic work, particularly by women, and enhance efforts to ensure equal pay for equal work or work of equal, and to promote work-family balance as conducive to the well-being of children, youth, persons with disabilities and older persons and the achievement of gender equality and the empowerment of all women and girls, interalia, through the improvement of working conditions for workers with family responsibilities, expanding flexible working arrangements, including through the use ofnew information and communications technologies, and providing and/or expanding leave arrangements, such as maternity leave and paternity leave […]. [8]

  A key strategy to support mothers during the transition has been teleworking. Under normalconditions, teleworking was done voluntarily, with a view to allowing the work to be arranged in a way that best meets the overall objectives and needs of the companies and organisations, covering both employers’ and workers’ needs. With the pandemic, teleworking was boosted substantially, resulting in more than 1/3 of employed people working from home, with a greater share of women than men. [9] Compared to 2018, when less than 5% of employees worked remotely regularly and less than 10% occasionally, as reported by the EC 2020.

  Teleworking provides many opportunities to contribute to gender equality such as improved participation in the labor market; increased flexibility in the organization of working time and in combining unpaid care responsibilities with paid employment, which can improve labor market participation; productivity gains through higher performance; a better spatial match between demand and supply of labor without the need for moving to another place; time and cost savings due to the elimination of or decrease in commuting, etc.

  At the same time, teleworking carries some risks, such as possible challenges related to the worker becoming invisible in the work community; missing out on formal and informal support structures, personal contacts with colleagues and access to information, promotion and training opportunities; possible worsening of gender inequalities and increased risk of violence and harassment.

   For women, this can exacerbate existing gender inequalities. Mitigating such risks successfully calls for a proper gender analysis – as even policies that might look gender-neutral may, in reality, be gender blind and affect women negatively – so every effort must be taken to strive for a positive impact. [10]

Covid-19 Recovery

   Calls upon Member States, United Nations entities, within their respective mandates, and other relevant stakeholders to protect families and family members from the negative socioeconomic and health-related impacts of the COVID-19 pandemic, including, inter alia, by providing access to full and productive employment and decent work, as well as effective, inclusive, resilient and gender- sensitive social protection systems and public services, expanded child and family benefits, paid parental leave and sick leave, improved flexibility of working arrangements and gender-sensitive services to reduce the burden of care, including quality childcare. [11]

 The COVID-19 pandemic risks devastating long-term economic consequences for children, families, communities and countries around the world. Children who were already marginalized are the most affected, as they suffer the impact of living in poverty, lost education, poorer nutrition and disrupted mental health. Usually, economic crises are followed by cuts to government spending, including on programmes for children. If the world repeats this pattern in the wake of COVID-19, poverty and deprivation among children will persist long after the immediate crisis has waned.

   To prevent a lost decade, it is essential that countries invest in children to achieve sustained, inclusive economic growth and ensure they are prepared for the global economy of the future. We urgently need an inclusive recovery plan to reinstate the hard-won development gains of the past and avert the consequences of poverty for millions more children and their families.

   An inclusive recovery requires governments safeguarding critical social spending to ensure that social systems and interventions are protected from spending cuts and expanded where inadequate.

  For instance, identify and ring-fence spending on programmes for children, adopting the principle of children being first in line for investment and last in line for cuts; and expand resilient social protection programmes for the most vulnerable children, no matter their migration status, as well as families with children, including working towards universal child benefits and child-friendly services like affordable, quality childcare. [12]

Parenting Education

  Also encourages Member States to invest in family-oriented policies and programmes and to provide universal and gender-sensitive social protection systems, which are key to ensuring poverty reduction, including, as appropriate, targeted cash transfers for families in vulnerable situations, as can be the case of families headed by a single parent, in particular those headed by women, and which are most effective in reducing poverty when accompanied by other measures, such as providing access to basic services, high-quality education and health-care services, in addition to family services and counselling. [13]

  Family services and counseling are related to parenting education. Parenting support has been an important tool for parents and caregivers in their child-rearing efforts. It might not have always been known with this term, but it is certain that from one generation to another it has been informally transmitted a set of guidelines, comprehensive education and training of parents and caregivers. The shared priority has been children’s well-being and risk prevention. [14].

   Further encourages Member States to provide legal identity, including birth registration, in accordance with international law, including relevant provisions of the Convention on the Rights of the Child and/or relevant provisions of the International Covenant on Civil and Political Rights, and death registration, as a means of, inter alia, promoting peaceful and inclusive societies for sustainable development and access to benefits, including social protection. [15]

  In this regard, governments should invest in parenting education programs that address the different range of parenting needs and dimensions; empower parents and caregivers to continue to build on their good practices while enabling them to adopt others that will improve children’s health, development, learning and wellbeing and ensure they are protected.

   Also, make the well-being of parents, children and other caregivers’ the explicit objective of parenting policies and programmes, while investing in universal, positive parenting programs and services that are sensitive to the requirements of individual families and the different needs of mothers, fathers and other caregivers;

   Encourages Member States to invest in parenting education as a tool to enhance children’s well-being and prevent all forms of violence against children, including through promoting non-violent forms of discipline, and to ensure that parenting education programmes are inclusive of parents, grandparents and, where applicable, the members of the extended family or community as provided by local custom, legal guardians or other persons legally responsible for the children, maintaining a gender perspective throughout.[16]

 With a gender perspective in mind, efforts should be put into, recognizing the responsibility of men to families and encouraging their contribution, developing policies to address the absence of males/fathers on family well-being, and promoting active and present fatherhood;

   Also encourages Member States to establish policies that support all families in providing a nurturing environment, and in preventing and eliminating domestic violence and harmful practices, including female genital mutilation and child, early and forced marriage. [17]

  While providing a nurturing environment, parents and caregivers should recognize the valuable contribution of grandparents and other kins to parenting and invest in family policies and programs that promote strong intergenerational interactions, such as intergenerational living arrangements and parenting education in an effort to promote inclusive urbanization, intergenerational solidarity and social cohesion.

   Further encourages Member States to improve the collection and use of data, disaggregated by age, sex and other relevant criteria, for the formulation and evaluation of family-oriented policies and programmes to effectively respond to the challenges faced by families and harness their contribution to development. [18]

  In this regard, promote research on families and parenting, programmes evaluations and impact assessments of parenting policies and programs, so that the role of parents and their contribution to children’s wellbeing and social development can be better understood and supported by all stakeholders.

   Without leaving behaving the creation of an enabling participatory space to promote an environment for meaningful contributions of civil society organizations in the design, implementation and monitoring of family policies and programs, removing barriers to the establishment, work and funding of nongovernmental organizations.

Preparations for 2024

   Calls upon Member States, United Nations entities and relevant stakeholders to promote the preparations for the observance of the thirtieth anniversary of the International Year of the Family in 2024 at the national, regional and international levels through practical initiatives, including family-oriented policies and programmes responding to the needs of all families. [19]

   Our Federation together with a group of transnational and regional organizations is fully involved with the Preparations for the 30th Anniversary of the International Year of the Family. A whole plan of action has been put into effect and in a joint effort to make the year 2024 a turning point for families around the world.

   Invites relevant stakeholders, as part of the preparations for the thirtieth anniversary of theInternational Year of the Family, to support research and awareness-raising activities at the national, regional and international levels on the impact of technological, demographic, urbanization, migration and climate change trends on families in order to harness their positive effects and mitigate their negative impacts. [20]

   We are committed to turning the Anniversary into a substantial and enriching discussion to bring the role of the family unit and policies towards social development into reality. In order to make every effort more effective, we are following the lead of the United Nations Secretary General to focus on four megatrends.

   For instance, the latest Focus Group organized in early 2021 on New Technologies and Families has produced some valuable recommendations for policymakers. Among those, policymakers should adopt a holistic approach when considering the experience and needs of all the various partakers in education, like children, parents, caregivers, teachers, institutions.

 Education and child-related professionals should promote open communication between parents and children about digital technology, including discussions about online risks and benefits. Further, they should encourage parents to engage with the platforms and media their children utilize as a means of understanding their children’s digital lives. [21]

   We are committed to continuing the organization of Regional Group Meetings, Focus Groups and Raise-Awareness events to enrich the proposals of a Civil Society Declaration in the making. The importance of experts active in a variety of fields related to families is the cornerstone of any substantial contribution together with good practices and advice funneled from the Civil Society Perspective.

[1] undocs.org/A/C.3/76/L.18/Rev.1

[2] https://media.un.org/en/asset/k11/k11ic2a8rm

[3] undocs.org/A/C.3/76/L.18/Rev.1.

[4] undocs.org/A/C.3/76/L.18/Rev.1, OP2

[5] Lofmarck 2014.

[6] Sheeran, Jones, and Rowe 2016.

[7] Akerjordet and Severinsson 2010.

[8] undocs.org/A/C.3/76/L.18/Rev.1, OP8

[9] Eurofound report ‘Living, working and COVID-19’, 2020.

[10] Opinion on Teleworking and gender equality. European Economic and Social Committee, 24 March 2021.

[11] undocs.org/A/C.3/76/L.18/Rev.1, OP3.

[12] Report. Preventing a lost decade. Urgent action to reverse the devastating impact of COVID-19 on children and young people, UNICEF INNOCENTI, 2021

[13] undocs.org/A/C.3/76/L.18/Rev.1, OP11

[14] undocs.org/A/RES/74/124.

[15] undocs.org/A/C.3/76/L.18/Rev.1, OP12.

[16] undocs.org/A/C.3/76/L.18/Rev.1, OP14.

[17] undocs.org/A/C.3/76/L.18/Rev.1, OP15.

[18] undocs.org/A/C.3/76/L.18/Rev.1, OP16.

[19] undocs.org/A/C.3/76/L.18/Rev.1, OP4.

[20] undocs.org/A/C.3/76/L.18/Rev.1, OP5.

[21] Focus Group on Families and New Technologies – Outcome Publication, available at: https://familyperspective.org//focus-group-families-and-new-technologies/

El sentido de la lealtad

Suarez 2 (2) por Luis Suárez, Real Academia de la Historia.

   El término fidelidad puede responder a una definición más o menos amplia. Una de las acepciones que recoge el diccionario es el de «la observancia que alguien debe a otra persona». Esto puede confundirse fácilmente con la lealtad: «el que es leal guarda a alguien o algo la debida fidelidad». Aunque es cierto que desde la perspectiva de la virtud, que busca el bien de la persona (propio y ajeno), la fidelidad y la lealtad debieran representar el anverso y reverso de una misma medalla, su significado admite matices y aun diferencias. Más aún en el ámbito político o económico.

   Desde la Edad Media, la tradición española distinguía estas dos realidades en el ámbito de las relaciones personales y sociales. En efecto, fiel era el súbdito que seguía a su señor sin preguntarse por la justicia de su causa. Leal, sin embargo, era quien evitaba que el señor cayera en injusticia o incurriera en error. Ya las Cortes de Castilla de 1385 consideraban la lealtad como la principal virtud de la que dependen las monarquías para su existencia y progreso, pues de ella (el consejo emitido con rectitud moral para la gobernanza del reino) derivaríanCuriosidades históricas del capítulo 26 de 'Isabel' | RTVE.es todas las demás virtudes. Así, el súbdito o vasallo leal recordaría al rey su «deber de reinar» y no «su derecho». Es decir, invocaría sus obligaciones morales ordenadas a la edificación del reino y de sus súbditos. De aquí derivaría la llamada legitimidad de ejercicio, que otorgaría auténtico valor a la legitimidad de origen (la elección, por distintas circunstancias, de una dinastía reinante, precisamente para desempeñar dicho cometido a favor del bien común). Este presupuesto implicaría reciprocidad entre el rey y los súbditos, representados en las Cortes, asistiéndose mutuamente para promover el desarrollo espiritual y material de todo el reino.

   De la confusión antes citada han nacido en nuestros días algunas equivocaciones muy perjudiciales. Se ha creído, por ejemplo, que la fidelidad al superior o a quien tiene el poder (a nivel político, empresarial, etc.) es una virtud que obliga al subordinado. De ahí la monstruosidad de pensar que el jefe o líder siempre tiene la razón y que hay que obedecerlo ciegamente sin preguntarse por la justicia o moralidad de sus actos. Cesa entonces el deber de corregir, enmendar o aconsejar, propio de la lealtad. De ahí la tendencia, tan extendida, de quienes al frente del mando se rodean de simples fieles que asienten, alagan, aplauden y no discuten. Se pierde así el sentido de la limitación y el poder se convierte en un absoluto que busca resarcirse y no servir a los demás según el orden moral.

La Revolucion Gloriosa timeline | Timetoast timelines

   La legitimidad fundada en la virtud de la lealtad permitió en la antigua monarquía hispánica «acatar y no cumplir» la orden emanada del rey, pudiéndose iniciar un recurso de contrafuero que asegurara los derechos del reino y de sus súbditos en caso de verse conculcados. La obediencia no se entendía como un automatismo, sino como acto juicioso, que examina previamente si la orden es correcta o no. No existía esa argucia de la «obediencia debida» como eximente de responsabilidad, puesto que en una sociedad que procuraba inspirarse en los principios cristianos, prevalecía siempre el criterio de lo que es realmente debido, de lo razonable y bueno en cada circunstancia. El vasallo leal sabía que, una vez sopesada y aceptada una orden, se corresponsabilizaba con ella. En ese tiempo nunca se admitió el principio de irresponsabilidad del monarca en las decisiones tomadas por sus ministros, como ocurriría después en muchos regímenes parlamentarios. Y es que, como hemos dicho, también al rey competía ese sentido de la lealtad que le exigía velar por la justicia en los actos de sus servidores en el gobierno.

La monarquía regeneracionista

antoniomoralroncal (2) por Antonio M. Moral Roncal, historiador

   En abril de 1922, justo ahora hace cien años, por encargo del gobierno conservador de Sánchez Guerra, los doctores Marañón y Bardají realizaron un viaje a las Hurdes, comarca de la región de Extremadura, para que informasen sobre la situación de sus habitantes. En las Cortes, el conde de Romilla había denunciado la falta de medios de vida más indispensables de sus habitantes, abandonados de la acción oficial. Y el informe de los médicos confirmó su penosa situación. En una comida en casa de la marquesa de Villavieja, a la que asistió Alfonso XIII, coincidió Ortega y Marañón ante la crisis del liberalismo», no apto para melancólicosel rey con Marañón, Ortega, Pío Baroja y otras figuras del mundo intelectual. Al salir en la conversación el tema de las Hurdes, la cuestión interesó profundamente a don Alfonso, que aceptó ir personalmente “a recorrerlo todo y a remediar lo que se pueda”. Y es que el rey había realizado numerosos viajes para conocer España y sus habitantes, por lo que se mostró interesado especialmente por realizar un periplo diferente: no habría cenas de gala, ni arcos de triunfo ni festejos de inauguración. Este viaje a las Hurdes sería diferente.

   Así, en las primeras horas del 20 de junio una serie de coches partieron del palacio real de Madrid. Junto al rey se encontraban el duque de Mirada, su ayudante, coronel Obregón, y los doctores Marañón y Varela. En otro vehículo viajaron el ministro de Gobernación, Piniés, el diputado conde de Romilla, el periodista Juan García de la Mora y el fotógrafo Campúa, con un oficial de la guardia civil. A partir del día 22 -desde eduardo saenz de varona: julio 2020Segura de las Torres- la expedición hubo de continuar a caballo, ya que no existían carreteras aptas para coches. En Casar de Palomero se incorporó el obispo de Coria, Segura, cuyo trabajo e interés por los hurdanos apreció don Alfonso. Dejando atrás la Alberca, el rey visitó los pueblos de Pinofranqueado, Mensegal, Calabazas, Vega de Coria, Cambrocano, Nuño Moral y otros más. En la tarde del día 24, y ya desde Béjar, en tierras salmantinas, se inició la vuelta a la capital.

   Durante el viaje, Alfonso XIII acampó y se desenvolvió entre los hurdanos sin protocolo, que le acogieron con sorpresa y entusiasmo. Marañón describió al monarca, esos días de convivencia, como “un hombre sumamente abierto, sumamente inteligente, y con una simpatía arrolladora”. Los componentes de la expedición repartieron dinero entre las familias, responsabilizando a los curas párrocos de su distribución, atendieron médicamente y proporcionaron medicinas a los hurdanos, preguntaron por sus problemas y hasta don Alfonso visitó a un moribundo en su choza. Y a todos se les encogió el corazón en un puño al comprobar auténticos cuadros de miseria física y moral.

Campúa, único fotógrafo en el viaje de Alfonso XIII a Las Hurdes | Campúa,  una mirada a la historia

   El doctor Marañón escribió un artículo en la revista Vida Médica, el 25 de julio siguiente, bajo el título “El problema de las Hurdes”, donde afirmó que “el rey pudo hacer el bien a manos llenas, y pudo gustar del amargor y de la alegría de palpar una gran tristeza nacional y de soñar en remediarla. Éste es el sentido, pudiera decirse que trascendental, del viaje del rey a las Hurdes… A despecho de todo el artificio de la política podemos seguir esperando que los anhelos legítimos del país lleguen a los oídos del rey y encuentren en este eco y entusiasmo. Por encima de todas las ideas debe flotar esta esperanza”.

   Los resultados de la visita de Alfonso XIII revistieron un doble significado. Las Hurdes, de ser un rincón del que se tenían noticias molestas e inquietantes pasó a convertirse en una ineludible realidad. Y, de esta manera, se inició un camino, lento pero constante durante 9 años, coordinado por el Patronato Real de Las Hurdes -creado el 18 de julio-, que intentó buscar remedio a esa intolerable situación. A partir de la vuelta del monarca a Madrid, Las Hurdes empezaron a recuperar, así, su dignidad y el derecho a reconocerse como un pueblo integrado en la realidad de España.

   El Patronato Real de Las Hurdes, dependiente del Ministerio de la Gobernación, tuvo plena capacidad jurídica en sus actuaciones, gozando de recursos provenientes de las Instituciones de Beneficencia General. La primera acción emprendida fue la construcción de tres establecimientos denominados Factorías, que fueron organismos benéficos en cuyos edificios se albergaron a médicos, maestros, estafetas de correos y guardias civiles. Enclavadas en Las Mestas, Caminomoris y Nuñomoral tuvieron la misión de llevar a todos losfactoría Hurdes lugares de la geografía hurdana los recursos más necesarios para cumplir su misión de regeneración. La segunda acción fue la puesta en marcha de acciones para luchar contra el analfabetismo de la zona. Por ello se organizó una Misión pedagógica, con un maestro director, una maestra subdirectora -encargada de la organización de una escuela maternal y el internado de las niñas- y de tres maestros responsables de las escuelas de los niños, que se establecieron en las factorías. Además, se construyeron doce escuelas en diversos pueblos, con dinero público y donaciones privadas, como las 200.000 pesetas que aportó el marqués de Valdecilla. Para abastecer de comida a las escuelas -que tuvieron cocina y comedor para los niños y casa-habitación para los maestros- el Patronato Real concedió subvenciones a algunas cantinas.

   Y como siempre se había asociado el atraso de la región a la falta de buenas comunicaciones, se puso en marcha la construcción de caminos forestales, que permitieran una circulación de actividad adecuada, para lo cual se invirtieron dos millones de pesetas. La red de caminos forestales unió internamente todas las alquerías de Las Hurdes, aunque no por ello dejó de construirse una carretera que vertebrara la comarcaReal Patronato de las Hurdes (1922-1931): Una institución de beneficencia  al servicio de las Hurdes de sur a norte y viceversa. Además, para impulsar la economía, se estableció un plan de reforestación del territorio, unas 47.000 hectáreas diseminadas que deberían proporcionar a los hurdanos un nuevo modo de aprovechamiento del entorno, anteriormente solo destinado a la mera subsistencia por medio de pequeños minifundios. A este plan, establecido por Real Decreto de 26 de julio de 1926, se destinaron cien millones de pesetas para la adquisición de 25.000 hectáreas, que deberían generar una industria en torno al monte; la construcción de viveros necesarios para las repoblaciones, casas para guardas y caminos forestales.

   Para remediar los males espirituales y morales de la sociedad hurdana, el Patronato Real decidió reconstruir y construir de nueva planta una serie de iglesias en todos los poblados, que dotaran de parroquias a numerosos hurdanos. Allí fueron enviados más sacerdotes, encargados de reevangelizar mejor a sus gentes, aumentando el nivel de cultura y moral religiosa. Cuando el rey Alfonso XIII volvió a Las Hurdes en marzo de 1930, comprobó los avances y mejoras de todo tipo, haciendo su viaje ya en coche pues las obras realizadas ya habían eximido la necesidad de viajar a lomos de caballerías. Los trabajos realizados supusieron para los hurdanos una mejora clara en su calidad de vida que hasta entonces no habían conocido, un progreso que empezó a normalizar la tierra en sus ámbitos educativos, sanitarios, de comunicaciones… que continuóOtro rey en Las Hurdes 100 años después - almahurdes.com durante el resto del siglo XX en distintos tiempos y grados. Pero cuando el escritor republicano Vicente Blasco Ibáñez lanzó un panfleto denigratorio contra el rey en 1924, los hurdanos no lo dudaron y firmaron un álbum que, aún hoy, se conserva en la Biblioteca del Palacio Real de Madrid con el título A S.M. el Rey Don Alfonso XIII en testimonio de gratitud y respetuoso cariño los hurdanos, 23 enero 1925.